El pleno del Parlamento de Galicia ha aprobado el análisis del Consello de Contas sobre la actividad económica de la Xunta en el año 2021 entre críticas de la oposición, que considera que los trabajos del órgano fiscalizador de la administración autonómica «se dilatan» en el tiempo para reducir el impacto de sus recomendaciones que, según BNG y PSdeG, «no» son tenidas en cuenta por la Xunta.
La sesión plenaria que este martes ha echado a andar en el Pazo do Hórreo tenía como segundo punto del orden del día el debate y votación del dictamen y las propuestas de resolución de la Comisión Permanente no Legislativa para las Relaciones con el Consello de Contas, que analizó la memoria de actividad del organismo de 2022, en el que se puso el foco sobre la cuenta general de la Xunta del año previo.
Así, además de recibir luz verde el dictamen general sin votos en contra, el Parlamento también ha aprobado dos recomendaciones procedentes del Grupo Popular, que, por un lado, insta a la Xunta a «continuar dando cumplimiento efectivo» a las recomendaciones de Contas y, por otro, aboga por avanzar en la digitalización y presentación telemática de sus actividades.
Asimismo, el grupo mayoritario facilitó la incorporación a las conclusiones de dos aportaciones del PSdeG –ninguna del BNG fue aceptada–. De esta forma, salieron adelante –también sin votos en contra pero con la abstención del Bloque– que sean analizadas las cuentas de las fundaciones de investigación vinculadas al Servizo Galego de Saúde y que la Xunta consensúe con las entidades locales un estudio sobre el coste de las competencias impropias que asumen las corporaciones municipales.
CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN
Durante el debate, en el que declinó participar el diputado de Democracia Ourensana Armanda Ojea, los grupos de la oposición han dirigido sus críticas a lo que ven como una forma de «diluir» el trabajo de Contas por ser sometido a análisis y aprobación el análisis de las cuentas de hace tres años.
Así lo ha manifestado la parlamentaria del BNG Noa Presas, que ha acusado al PP de practicar un «filibusterismo parlamentario cutre» que provoca que los debates sobre la actividad de Contas «lleguen tarde y sean opacados». En todo caso, cree que «con cada informe, gota a gota, se aprecia más el lodazal» de la gestión económica del PP desde la Xunta.
Por su parte, la viceportavoz de los socialistas en la Cámara Elena Espinosa también dirigió sus críticas hacia el PP por ver Contas «como un estorbo» y rechazar las peticiones de «más transparencia» porque les resultan «incómodas» y les conceden «cero valor».
En su turno, la encargada de defender la postura del PP, la diputada Cristina Arias, ha asegurado que «a día de hoy todos los informes de fiscalización de Contas y susceptibles de ser debatidos están tramitados», por lo que ha acusado a la oposición de «retorcer la realidad».