El director xeral de Ganadería, Agricultura e Industrias Agroalimentarias, José Balseiros, ha llegado un acuerdo con representantes de las organizaciones Unións Agrarias y Asociación Agraria Galega (Asaga) sobre la fórmula, procedimientos y cobertura de ayudas directas para atender a todas las granjas afectadas por la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE).
Según ha explicado Balseiros tras el encuentro, habrá una orden de ayudas directas que se concederán sobre la base de datos de afectados con la que cuenta la Consellería –donde figuran las explotaciones que registraron casos tanto en 2023 como en 2024–, de forma que se evita a los ganaderos burocracia y «cubrir un sinfín de papeles», por lo que solo tendrán que aceptar la subvención para poder cobrarla «en el menor tiempo posible».
Estas subvenciones servirán para paliar las pérdidas por muerte de animales positivos –cuestión ya contemplada hasta ahora y que se complementará–, además de compensar los costes veterinarios y de desinsectación en el ganado y en las instalaciones.
Balseiros ha agradecido la colaboración de estas dos organizaciones que «han querido» hacer aportaciones para la puesta en marcha de estas ayudas.
Esta línea de ayuda está vinculada a la publicación del Real Decreto que regulará los criterios y posterior reparto de fondos, previsto para el 25 de septiembre, según lo avanzado por el Ministerio de Agricultura.
Balseiros recuerda que Galicia fue pionera en indemnizar a los ganaderos por animales muertos por EHE, con una línea convocada a comienzo de 2024 de la que se pagaron más de 200.000 euros. Agrega que las nuevas ayudas serán complementarias, por lo que los que se beneficiaron ya de la primera línea recibirán otro pago compensatorio.
SATISFACCIÓN DE ORGANIZACIONES AGRARIAS
Al respecto, el líder de Unións Agrarias, Roberto García, valora que en este acuerdo se incluyen «elementos útiles» e «imprescindibles» para los ganaderos al atender tanto a los que tienen el problema como a «todos aquellos que ya tuvieron este problema». Valora que se opte por un procedimiento administrativo más ágil para que se pague antes de que termine el año, al igual que la «voluntad de buscar acuerdos».
Por parte de Asaga, Francisco Bello aplaude que este es un acuerdo que a «todo el mundo beneficia», a falta de que salga la normativa a nivel estatal, y ensalza «un esfuerzo de diálogo».