La conselleira de Vivenda e Planificación de Infraestruturas, María Martínez Allegue, y el conselleiro de Cultura, Lingua e Xuventude, José López Campos, han visitado este miércoles las obras de voladura del llamado Desmonte 6, enmarcadas en los trabajos de prolongación de la autovía AG-59 desde Ramallosa a Pontevea.
El grado de ejecución de los trabajos de prolongación se sitúa a día de hoy en el 12,3 % y la previsión es que estén culminados a finales del año 2025.
Dentro de las actuaciones previstas de este nuevo tramo de la autovía Santiago-A Estrada, es necesaria la excavación del Desmonte 6, en el entorno del punto kilométrico 102+750, cerca de Olveira, en Teo.
El tipo de materiales, con características rocosas, impiden que el desmonte pueda hacerse con medios mecánicos, por lo que deben ejecutarse voladuras con explosivos. La actuación abarca un volumen total de material de unos 4.500 metros cúbicos, por lo que se han empleado unos mil kilos de explosivos.
Para llevar a cabo esta intervención, presupuestada en 39.000 euros, se efectuaron 100 barrenos de una media de 5 metros de largo, formando una malla de 33 metros. Esta voladura, junto con las previstas en los próximos meses, son la parte más importante del movimiento de tierras y el material extraído se utiliza para relleno en la explanada de la autovía.
Con estos trabajos, la Xunta avanza en la ejecución de las obras del nuevo tramo de autovía libre de peaje, obras que comenzaron en octubre de 2023. En total, la inversión en esta actuación será de más de 33 millones de euros y permitirá habilitar 3,5 kilómetros nuevos de la AG-59.
Paralelamente, la Xunta sigue avanzando también en el proyecto de construcción de la segunda fase de la autovía, un trecho de 4 kilómetros entre Pontevea y O Rollo, ya en el municipio de A Estrada, un proyecto con una inversión de 30,6 millones y está pendiente de ajustes técnicos para su aprobación.