La CIG-Vigo ha llamado este jueves a manifestarse el próximo 10 de marzo, Día da Clase Obreira Galega, ante la «grave situación de precariedad y pobreza» que afecta a la mayoría social y para reclamar un «marco gallego» de relaciones laborales.
El secretario comarcal del sindicato nacionalista, Alberte Gonçalves, y la miembro de la Ejecutiva Comarcal, Raquel Pérez, han comparecido en rueda de prensa para presentar la movilización del domingo en la ciudad de Vigo, en la que partirá una manifestación a las 12,00 horas desde el cruce de A Doblada. Esta marcha se suma a la convocadas ese día por la CIG en Santiago, y a las concentraciones que tendrán lugar en el resto de grandes ciudades gallegas.
El lema de la reivindicación este 10 de marzo será ‘Stop precariedade. Traballo digno. Por un marco galego de relacións laborais’, y se encuadra en la campaña «contra la precariedad» iniciada por la CIG a principios de año.
Alberte Gonçalves ha subrayado que, en los últimos años y a raíz de las reformas laborales, esa precariedad se ha «multiplicado» y la mayoría social ha visto empeoradas sus condiciones laborales y salariales. Así, ha incidido en que la situación se ha agravado «bajo nuevas formas de contratación», como la fija-discontinua, que modifican las estadísticas pero no mejoran las condiciones.
El responsable comarcal de la CIG en Vigo también ha criticado el abuso del período de pruebas por parte de las empresas como modalidad de contratación con despido libre, el refuerzo del papel de las ETT o el aumento de facilidades para la aplicación de ERTE.
Al respecto, ha subrayado que ni se corrigió la brecha de género, ni aumentaron los salarios ni se redujo la inestabilidad laboral. «Se hace realidad la figura del trabajadora y la trabajadora pobres porque, hoy en día, tener un empleo no garantiza que se puedan tener los ingresos mínimos necesarios para vivir con dignidad, y acceder a derechos básicos como alimentación, energía o vivienda», ha advertido.
Tras recordar que ni el PP ni la coalición PSOE-Sumar han puesto freno a las políticas neoliberales y que la Xunta se limita a «aplicar la versión más dura» de esas políticas, Alberte Gonçalves ha llamado a la movilización porque «no se puede permitir que el resultado de las elecciones gallegas del 18F tengan como consecuencia un endurecimiento de las políticas reaccionarias, antisociales y antigallegas del PP».
A las puertas del 10 de marzo, el responsable sindical ha reiterado la necesidad de un Plan Gallego de recuperación económica, de industrialización, creación de empleo y refuerzo de los servicios públicos; medidas para acabar con la precariedad y los bajos salarios; una nueva legislación «que restituya los derechos perdidos»; y un «marco gallego de relaciones laborales» para «ejercer un derecho democrático, como es negociar en Galicia nuestras condiciones de vida y nuestros salarios con plenas garantías».