El PP ha vencido con holgura las elecciones autonómicas del domingo, 18 de febrero, en los municipios de la ría de Muros y Noia (A Coruña), donde se produjeron los primeros avisos por el vertido de pélets plásticos en diciembre.
Los ‘populares’ han obtenido su peor resultado en Muros pero aun así han sido primera fuerza, con un 44,01%, al bajar apenas 0,61 puntos porcentuales con respecto a las gallegas de 2020. El BNG, por su parte, se consolidó en segunda posición a cinco puntos, con un 38,72% (+8,59); y el PSdeG bajó al 12,69% (-4,79).
Por el contrario, el PP ha tenido su mejor porcentaje en Outes, donde ha alcanzado el 57,37%, casi dos de cada tres votos pese a dejarse medio punto. También allí ha crecido el BNG hasta el 28,88% (+4,67) y el PSdeG ha caído al 8,93% (-2,83).
Además, el PP ha acaparado casi la mitad de los votos en el resto de municipios de la ría, sin apenas resentirse. En Ribeira, ha obtenido el 49,2%; mismo porcentaje que en Noia; y en Porto do Son ha alcanzado el 49,9%. También en todos ellos el Bloque ha experimentado una subida y ha sido segunda fuerza, mientras que el PSdeG ha bajado.
Estos datos reflejan cómo los ciudadanos de la zona no han castigado en las urnas la gestión del vertido de pélets plásticos desde la Xunta. En todo caso, el que de verdad se ha resentido en las localidades de la ría ha sido el Partido Socialista, que dirige el Gobierno central.
Las primeras llamadas por la aparición de las bolitas de plástico en la costa gallega llegaron desde Corrubedo, en Ribeira, el 13 de diciembre, cinco días después de que el buque ‘Toconao’ perdiese varios contenedores frente a las costas portuguesas. Y es precisamente en la ría de Muros y Noia donde se organizaron las primeras recogidas voluntarias del material.