La CIG-Ensino habla de «uno de los recortes más grandes de los últimos años» en la educación pública gallega para el próximo curso. Según un estudio realizado por el sindicato, en base a datos de la Xunta, habrá 60 unidades de Educación Infantil y Primaria menos, lo que se traduce en 89 plazas docentes menos.
La central nacionalista se muestra crítica por una actitud de «imposición y no negociación» por parte de la Consellería de Educación, puesto que «estos recortes ya habían sido advertidos» en julio. Además, censura que la orden de modificación de unidades se publique en el Diario Oficial de Galicia (DOG) «a viernes 18 de agosto, en pleno verano».
De acuerdo con los cálculos de la CIG, habrá en el curso 2023/24 un total de 60 aulas de Educación Infantil y Primaria menos, que se traducen en 38 puestos de trabajo en Infantil y 51 en Primaria menos, incluidas siete en centros de Educación Especial.
La Consellería, a través de un comunicado, defiende que hay un refuerzo en el número de unidades –que suben en 18, al pasar de 11.916 a 11.934– en todos los niveles educativos del próximo curso, pero el sindicato lo atribuye a la subida en Secundaria, lo cual compensa la caída en Infantil y Primaria.
Y es que, si bien en estas dos últimas etapas para el próximo curso habrá 2.643 alumnos menos que el anterior, en la ESO ascienden en 960. Con todo, en declaraciones a Europa Press, el responsable de CIG-Ensino Diego Boquete habla de «oportunidad perdida», porque no se aprovecha el descenso de la natalidad para mantener recursos y personal y, así, «reducir las ratios» de estudiantes por cada clase.
En este contexto de reducción de aulas, Boquete augura un «comienzo de curso caliente» en caso de que la Consellería «siga aplicando recortes». A esto suma las reivindicaciones que mantienen los sindicatos para reducir el horario lectivo implantado en el año 2011, con Alberto Núñez Feijóo como presidente de la Xunta.
Aquel año, se elevaron de 18 a 21 las horas de clase a la semana en ESO y Bachillerato, y de 21 a 25 en Infantil y Primaria. Así, la CIG lamenta que «solo Galicia y la Comunidad de Madrid» todavía no hayan reducido este horario una década después de implantarlo.
Por ello, Diego Boquete insta a la Consellería de Educación a «negociar» esta cuestión y a cesar en su «política de desmantelamiento de la enseñanza pública» si no quiere un inicio de curso «conflictivo». «Porque el profesorado ya dice ‘hasta aquí llegamos'», señala, en declaraciones a Europa Press.