La Guardia Civil de Tráfico interceptó el pasado viernes en Agolada (Pontevedra) a un conductor que, además de circular sin carné porque nunca lo llegó a obtener, multiplicaba por seis la tasa máxima de alcoholemia permitida. Además, el vehículo carecía del seguro obligatorio y no tenía la ITV pasada.
El hombre, vecino de Agolada de 54 años y único ocupante del coche, fue ‘cazado’ por los agentes después de sufrir una salida de vía y chocar contra un muro en la EP-6009, pese a lo cual resultó ileso.
Al llegar al lugar, la Guardia Civil observó que presentaba síntomas evidentes de encontrarse bajo la influencia de bebidas alcohólicas. Así, en la preceptiva prueba, arrojó una tasa de 1,57 miligramos por litro en aire respirado, lo que supone más de seis veces el máximo permitido, que es de 0,25.
Asimismo, los agentes comprobaron que carecía de permiso de circulación y que, de hecho, no lo había obtenido nunca. Por todo ello, el Instituto Armado lo investiga penalmente por sendos delitos contra la seguridad vial e instruye diligencias el juzgado de guardia de Lalín.
Junto a esto, le impusieron una sanción administrativa porque el coche no tenía seguro y no había pasado la ITV dentro del plazo establecido.
CAMIÓN CAMUFLADO
Por otra parte, el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra informa de de que emplea un camión camuflado con colores comerciales, que trabaja apoyado por otros vehículos oficiales rotulados, con el fin de detectar conductas que constituyan un grave riesgo para la seguridad en la carretera.
El objetivo principal es prevenir y reducir la siniestralidad derivada, principalmente, de distracciones como el uso del teléfono móvil.
El empleo de un camión para esta labor de vigilancia permite que, al tener una posición más elevada, se detecte un mayor número de infracciones no solo en turismos y en furgonetas, sino también en otros camiones y en autobuses.