El ministro de Sanidad, José Miñones, ha manifestado que desde el Gobierno seguirán las «recomendaciones» que fijen los expertos, al ser preguntado por la propuesta hecha desde el gobierno autonómico de Madrid para que se elimine su uso en hospitales y centros de salud, tras su implantación por la pandemia.
A preguntas de los periodistas, con motivo de su presencia en un acto en A Coruña sobre las actuaciones para impulsar hábitos saludables en niños y adolescentes, se ha remitido al comité de expertos creado y a su papel de asesoramiento «en las medidas a tener en cuenta».
«Seguiremos las recomendaciones que nos trasladen», ha añadido sin querer entrar en más detalles al ser cuestionado, de nuevo, sobre el posicionamiento del Ministerio a este respecto.
ACUERDO SANITARIO EN GALICIA
Por otra parte, sobre el acuerdo alcanzado en Galicia y que puso fin a la huelga en la sanidad gallega, convocada en solitario por la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) y que duró nueve días, ha manifestado que «todo lo que sea acuerdo y diálogo es algo positivo».
En particular, ha mostrado su satisfacción por la repercusión que esto tiene no solo en los profesionales sino también en la ciudadanía.
Por otra parte, ha trasladado a las comunidades autónomas la voluntad de colaboración del Ministerio para mejorar la prestación sanitaria y de recursos humanos «y que las autonomías sigan apostando por la sanidad pública».
Al hilo de ello, ha reivindicado las actuaciones del Ejecutivo en materia sanitaria. Así, entre otras cuestiones, ha citado el «aumento histórico de plazas MIR» o la «estabilización» de plazas.
«Unas cifras récord que nos van a permitir, de cara al futuro, seguir mejorando», ha sentenciado Miñones, quien ha vinculado el problema de falta de profesionales con «las consecuencias de no haber sacado plazas» en el pasado, en referencia a los gobiernos del PP. «No es cosa que se solucione en dos, tres o cuatro años», ha sentenciado.