El vicepresidente primero de la Xunta, Francisco Conde, ha acusado este miércoles al BNG de practicar «termalfobia» y «turismofobia», al tiempo que ha culpado al Ayuntamiento de Ourense de que las termas de As Burgas continúen cerradas.
Así lo ha respondido en el pleno del Parlamento gallego al responder a una pregunta oral de la diputada nacionalista Noa Presas, quien ha criticado el «bloqueo termal» de la Administración autonómica a la tercera ciudad de Galicia: «El problema es la ‘ourensofobia’ que tienen ustedes».
Además, la diputada del BNG ha recordado aquella promesa del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, de crear en su gobierno un área de termalismo, «de la que no se anunció ni presupuesto, ni personal, ni funciones».
En su respuesta, el vicepresidente primero de la Xunta ha acusado al Bloque de «turismofobia», recordando la campaña ‘Rachemos co Xacobeo’ que había lanzado Galiza Nova en 2021. A esto ha añadido la «termalfobia» que desprenden los nacionalistas con la exposición de motivos del texto de la pregunta oral registrada en el Parlamento.
En este sentido, ha lamentado que Noa Presas no conozca «la capacidad instalada» que tiene Galicia desde el punto de vista termal, con 21 balnearios y 11 aprovechamiento lúdicos termales solo en la provincia de Ourense.
Así, Francisco Conde ha aprovechado la respuesta para reivindicar la «seguridad jurídica» que da la ley de aprovechamiento lúdico de aguas termales de Galicia en vigor desde 2020 y que la diputada del BNG ha calificado de «fracasada».
Sobre As Burgas, el vicepresidente ha recordado que el espacio fue «regularizado» por la Xunta el 28 de diciembre de 2021 y que «a partir de ahí» la responsabilidad de reabrirlas corresponde a los titulares de las concesiones, algo que «no hicieron» en 2021 a pesar de que se le concedió una ayuda al Ayuntamiento de Ourense para acometer las actuaciones necesarias.
En cualquier caso, ha confirmado que también la concederán en la nueva convocatoria en 2023.