Los cuatro vecinos de A Estrada (Pontevedra) y los tres de A Pobra do Brollón (Lugo) que estaban atrapados en Perú, a raíz de las protestas originadas por la destitución y detención del presidente Pedro Castillo, viajan este martes en un vuelo a Madrid, desde donde volverán a Galicia en próximas horas.
El alcalde de A Pobra, Xosé Luís Maceda, celebra la llegada a Barajas de sus tres vecinos –dos jóvenes, Adrián y Jara, y el padre de esta última, Fernando– que se producirá este mismo martes a mediodía. Tras el aterrizaje, tienen previsto viajar al municipio lucense.
Aunque Maceda atestigua que «no» lo pasaron mal, sí que les pesó «la incertidumbre» y los gastos «añadidos» por ampliar su estancia y la pérdida de «vuelos» para volver a casa. «El problema era la incertidumbre, dada la situación política que atraviesa Perú, de cuándo podrían regresar a España. Estuvieron bien y no vivieron situaciones de violencia», ha constatado.
Sí que tuvieron que padecer «el bloqueo de carreteras por parte de los manifestantes y también el aeropuerto de Arequipa, que estaba inoperativo y eso dificultaba que pudiesen regresar». «Esto produjo incertidumbre, no sabían cuando podían volver. Además, supongo, la cuestión económica porque había que estar más días de los previstos, perdieron vuelos y es un gasto añadido», ha subrayado.
Los tres habían viajado al Machu Picchu «y la ciudad más próxima es Arequipa, que es la segunda ciudad más importante de Perú y está a 1.000 kilómetros de Lima, a 18 horas en autobús y hora y media en avión».
Maceda ha puntualizado que la vuelta la gestionó «a través de la subdelegación del gobierno en Lugo y de la mediación de la eurodiputada del BNG, Ana Miranda que tenía contactos en Perú». «Fueron ellos los que movieron los hilos para trasladarlos a Lima, a través de un avión militar de las fuerzas aéreas» del país.
De igual modo, en el mediodía de este martes estaba prevista la llegada de cuatro jóvenes de A Estrada, dos chicos y dos chicas, que habían viajado al país latinoamericano para ir a una boda de un amigo y su novia peruana, que viven también en el municipio pontevedrés, y luego aprovecharon para hacer turismo.
Tal y como relató a Europa Press el alcalde estradense, José López, estaban en Aguas Calientes, un pueblo cercano al Machi Picchu, y allí se quedaron retenidos en un hotel «sin información y sin poder salir de allí» dado el estado de emergencia decretado por el nuevo Gobierno. Entonces, decidieron emprender un viaje a pie a Cuzco, de varias horas de duración, en medio de un numeroso grupo de turistas que se vieron con el mismo problema.
Una vez en Cuzco, se encontraron el aeropuerto cerrado, aunque «la situación fue mejorando» y finalmente pudieron volar hasta Lima. Ya desde allí, entre este lunes y este martes, vuelan de vuelta a Madrid para, en próximas horas, estar de vuelta en casa.