Los dos grupos de la oposición –BNG y PSdeG– aprovecharán la comparecencia del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, de este martes en el Parlamento gallego para exigirle que mire a «la mayoría social» y a la «clase trabajadora» de Galicia, y que retire sus «rebajas fiscales para ricos», como la bonificación de hasta el 50 por ciento en el impuesto de patrimonio anunciada el pasado viernes.

En una rueda de prensa ofrecida este lunes desde el Pazo do Hórreo, la viceportavoz parlamentaria del BNG, Olalla Rodil, ha explicado que la portavoz nacional del partido, Ana Pontón, aprovechará el debate –en el que Rueda desgranará las líneas de los presupuestos del próximo año– para denunciar el «regalo fiscal» que hace la Xunta «para 7.000 personas», que son las «más ricas».

Esta rebaja, ha dicho «supondrá un durísimo golpe para el 99 por ciento de los gallegos», que tendrán 34 millones de euros «menos» en las cuentas autonómicas de 2023. Según cifras de Rodil, es el montante «de todo un año» para luchar contra el fracaso escolar y «tres veces» el de las ayudas para víctimas de violencia machista. «Nos preguntamos de dónde van a recortar ese dinero que dejamos de ingresar en las arcas públicas», ha insistido.

Esta política supondrá también «seguir poniendo a la Atención Primaria contra las cuerdas» y nuevos recortes «en educación» y «en servicios de cuidados a los mayores», tal y como ha advertido la viceportavoz del BNG. Todo esto, además, «en un contexto de alza de precios como no se registraba desde hace 40 años».

De acuerdo con cifras del Bloque –citando a la Axencia Tributaria de Galicia (Atriga)–, en los últimos ocho años las disminuciones de impuestos supusieron que la Xunta dejó de ingresar 1.000 millones de euros. «Son unas rebajas fiscales que, ¡oh, qué casualidad!, siempre van dirigidas al mismo sitio: a los que más tienen», ha ironizado.

Frente a esto, Olalla Rodil ha confirmado que, durante el debate con el presidente de este martes, Ana Pontón exigirá movilizar esos 1.000 millones de euros en el año 2023 como «plan de rescate social ante la crisis» y «para la clase trabajadora», con medidas como destinar 200 millones de euros a la Atención Primaria, apoyos a sectores estratégicos y recuperar la llamada Tarxeta Básica suprimida en mayo, entre otras.

En esta misma línea, el viceportavoz parlamentario del PSdeG Julio Torrado ha censurado que los que van a pagar menos son «los que tienen un millón de euros de patrimonio, o más», por lo que no beneficia «a la mayoría social del país, que son los que pagan la inflación».

Además, el socialista ha avisado a Rueda de que Galicia «necesita un liderazgo potente y unas políticas pensadas desde Galicia y para Galicia», con una «política fiscal propia», y no «estar plegado a lo que dicen desde el PP en Madrid».

«Nosotros (el PSdeG) somos los de las mayorías sociales», ha reivindicado Torrado, quien ha reclamado insistentemente al titular de la Xunta que «cambie su mirada» y entienda que «es el presidente de Galicia» y «no el director de campaña» de Alberto Núñez Feijóo.

FALTA DE DOCUMENTACIÓN

Además, ambos grupos de la oposición se han vuelto a quejar de que, a 24 horas de que Alfonso Rueda explique en la Cámara los detalles de los presupuestos de 2023, todavía no se les ha remitido ningún informe al respecto. «Toda la documentación que tenemos en el Parlamento de Galicia es esto», ha esgrimido la viceportavoz del BNG, mientras sostenía un folio con la solicitud de comparecencia cursada desde la Xunta.

«No tenemos nada en absoluto, ni un solo documento», ha reiterado Olalla Rodil, quien ha reducido a Rueda a «delegado del PP en Galicia». «Y bastante malo, por cierto», ha concluido.

El viceportavoz del PSdeG ha ratificado que la oposición cuenta con información sobre las cuentas del próximo año, aunque ha reconocido que ya es «bastante tradicional» que la Xunta facilite la documentación «buscando el récord del último minuto».

EL PPDEG DESTACA LA «TRANSPARENCIA» DE RUEDA

Frente a las críticas de socialistas y nacionalistas, el portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, ha ensalzado la «transparencia» con la que el presidente gallego acudirá al Parlamento a explicar las cuentas antes de registrarlas formalmente en la Cámara, algo «novedoso» e «importante».

Lo habitual es que, tras la aprobación del techo de gasto durante el verano, el próximo debate al respecto de los presupuestos no se produzca hasta que se aprueban por parte del Gobierno de la Xunta y llegan al Parlamento, algo que ocurrirá, tal y como ha avanzado Puy, «en tiempo y forma», antes del 20 de octubre para que entren en vigor el 1 de enero.

Por eso, le resultan «sorprendentes» los reproches de la oposición –«Critican a la Xunta cuando comparece y cuando no comparece»– y les ha replicado que conocerán los presupuestos sobre el papel «por la línea habitual», es decir, cuando se remitan a la Cámara.

Al respecto de la rebaja fiscal anunciada por Rueda, el portavoz del PPdeG la ha avalado porque se producirá en un momento de «inflación» y porque permite continuar «en la senda» de disminuir el impuesto de patrimonio –como ocurrió el año pasado en Galicia, con Alberto Núñez Feijóo en la Xunta–, que de hecho es «una rareza de los países europeos».

En este contexto, ha negado que ello vaya a incidir en las ayudas a los más vulnerables, dado que Rueda, en la última sesión de control en la Cámara, anunció que actualizaría a la inflación «las ayudas y prestaciones». También ha puesto el foco en que las cuentas de la Xunta para 2023 van a crecer un 8,2 por ciento, un nuevo máximo histórico.

En cualquier caso, preguntado sobre si está previsto que Rueda anuncie alguna medida más, Puy ha optado por la cautela: «Mañana escucharemos al presidente con atención».