El Ayuntamiento de Lugo dispondrá en 2022 de 106,8 millones, unas cuentas aprobadas por la corporación municipal con los votos en contra de la oposición. De las cuenta, el gobierno local destaca que se incluyen «más de 30 millones de euros dirigidos a políticas sociales».
«Unos presupuestos en los que la oposición ni está ni se le espera, pero con los que impulsaremos la dinamización de Lugo y su crecimiento con altura de miras, anticipación y compromiso», ha expuesto la alcaldesa, Lara Méndez.
Por su parte, la teniente de alcaldesa y edil de Gobernanza, Paula Alvarellos, señaló, en su intervención, que se trata de un proyecto «expansivo y solidario» y que incluye «actuaciones valientes, pero rigurosas».
Entre otras cuestiones, aludió a los fondos Next Generation como «auténtico revulsivo para la dinamización del municipio», a lo que sumó iniciativas como ‘Lugo Transforma’ para propiciar, ha dicho, el «cambio económico» en la ciudad.
A su vez, el teniente alcalde Rubén Arroxo (BNG) defendió un presupuesto diseñado bajo la idea de «continuar y avanzar en la mejora de Lugo, haciendo una ciudad más amable para las personas». Así, destacó inversiones como los 150.000 euros destinados a la mejora de la seguridad peatonal en la calle Gallego Tato.
CRITICAS DEL PP
Por el contrario, el portavoz del PP Ramón Carballo argumentó que no pueden apoyar estas cuentas «porque ni atienden las necesidades reales de los lucenses ni están pensadas para la recuperación post pandemia». Además, ha argumentado que podrían acarrear «una subida encubierta de las tasas e impuestos».
Tanto a Méndez como a Arroxo los acusó de «anteponer las agendas de su partido a la agenda municipal», al reprochar que se «retrasase la sesión del pleno para que la alcaldesa pudiese ir a Ourense a aplaudir la llegada de un AVE» que, según argumentó, deja a Lugo «en el vagón de cola».