El vecino de San Cibrao, en Cervo (Lugo), del que su familia desconocía su paradero desde el domingo, ha aparecido muerto cerca de su vivienda, según han informado a Europa Press fuentes de la Guardia Civil.
Se trata de un hombre de 35 años del que sus familiares denunciaron su desaparición en la tarde de ayer martes, aunque apuntaron que no tenían noticias de su allegado desde el pasado domingo.
Fuentes municipales han confirmado a Europa Press que era trabajador de Alcoa. En su búsqueda participaron efectivos terrestres de la Guardia Civil y también un helicóptero.