La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, ha reivindicado este lunes el «diálogo entre diferentes» para alcanzar «objetivos compartidos» y que la sociedad avance, frente a lo que ha denominado «la política ‘fake’ que degrada» la democracia. Por eso, ha proclamado que un «buen Gobierno» debe estar asentado el tres pilares: «Diálogo, ciencia y cooperación».
Así lo ha aseverado Díaz durante su discurso durante la inauguración este lunes del foro ‘Diálogo para el futuro del envejecimiento’ en el Centro Obra Social Abanca de Santiago de Compostela. Se trata de un evento en el que colaboran diferentes instituciones, entre ellas el Gobierno de España, el Ayuntamiento y el Parlamento Europeo.
En el acto inicial, además de la vicepresidenta segunda, han participado el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo; el presidente de Afundación, Miguel Ángel Escotet; y el consejero principal de la Dirección General de Agricultura y Medio Rural de la Comisión Europea, Diego Canga.
En su intervención, Yolanda Díaz ha ensalzado el diálogo como productor de «mejores ideas y más útiles», para lo que es «clave» el conocimiento científico: «El buen Gobierno necesita fundar sus decisiones en las evidencias, en la ciencia». Y es que, a su juicio, equiparar el engaño y las mentiras con la verdad significa «quebrar las reglas básicas del debate democrático» y abocarse» a la crispación», donde «solo importa aniquilar al adversario».
Además, ha recalcado la importancia de limar las «legítimas diferencias políticas» con una «obligada lealtad institucional», un diálogo que ha reivindicado como su insignia a la hora de tratar tanto con los agentes sociales como con las comunidades autónomas y la Unión Europea.
EL ENVEJECIMIENTO: «BENDICIÓN» Y «DESAFÍO»
De este modo ha ensalzado la también ministra de Trabajo y Economía Social este evento en el que, a lo largo de dos jornadas, se darán cita en la capital gallega representantes institucionales, expertos y académicos para debatir sobre envejecimiento desde la perspectiva de las pensiones, el empleo y la longevidad activa.
Al respecto, Díaz ha apuntado que, para el año 2050, «una de cada tres personas» en España tendrá más de 65 años, un fenómeno que ocurre en «todas las sociedades avanzadas» y que en Galicia, precisamente, es «una realidad imperiosa». Por esto mismo, ha dicho que el envejecimiento es «una bendición», pero también «un desafío».
Frente a este reto, la vicepresidenta ha trasladado ante los presentes una serie de reflexiones. Así, ha incidido en la necesidad de «valorar el capital humano sénior» en el mercado de trabajo para que los mayores puedan «transmitir el conocimiento a los que vienen detrás».
RECHAZA «ALARMISMOS» CON LAS PENSIONES
Asimismo, ha marcado como reto la «sostenibilidad» de las pensiones, así como la «suficiencia» y la «equidad generacional» de estas prestaciones. En este sentido, ha rechazado «alarmismos» sobre una supuesta quiebra del sistema «que nunca se produce», al tiempo que ha abogado por acometer «cambios en la línea de los países más avanzados» –como aumentar la tasa de empleo y reducir la precariedad– para garantizar que «toda persona mayor tenga una pensión digna».
Díaz también ha apuntado a una obligada mejora de la sanidad y ha dicho coincidir con el presidente de la Xunta en que es un asunto «clave» para abordar en la financiación autonómica, porque tanto la atención a la dependencia como el sistema de salud es «más caro» en Galicia que en Madrid por características como la dispersión de la población.
En cuanto a los cuidados, ha apelado a una mayor conexión con la sanidad y a «cambiar el paradigma hacia un modelo centrado en las personas». Así, Díaz ha abogado por promover la atención «de proximidad en el ámbito del hogar o de la familia si así lo desean» los usuarios.
LOS CUIDADOS
En este ámbito, ha reivindicado que el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 «está acometiendo una transformación del fondo del sistema de cuidados» con un «plan de choque de la dependencia» que aborda junto a las comunidades y a los agentes sociales y que tendrá un incremento de 600 millones de euros en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022.
De igual modo, la vicepresidenta ha señalado lo «fundamental» que es abordar una «revolución de los cuidados» para que las mujeres puedan ser «iguales y, además, libres».
Yolanda Díaz también se ha referido al «desafío del envejecimiento activo», porque «la vejez del futuro no va a ser la del pasado», y ha reivindicado las «oportunidades de empleo» que ofrece la llamada ‘silver economy’ –la economía plateada, en la que participan los consumidores más mayores–.
«UN NUEVO CONTRATO INTERGENERACIONAL»
No obstante todo ello, la ministra de Trabajo ha querido poner el foco en la gente joven y en la necesidad de darles «un futuro». «La auténtica maldición es que la gente joven se vea abocada a marcharse de su tierra por falta de alternativas, empleo y oportunidades de futuro», ha lamentado.
En esta coyuntura, ha apostado por «un nuevo contrato intergeneracional», porque tanto los mayores como los jóvenes «reclaman certezas y un horizonte de estabilidad», y ha prometido que su «gran aspiración» es «gobernar para todas y todos, y lo más importante: gobernar con todas y con todos».
No en vano, Díaz también ha mencionado que la pandemia de la covid-19 fue «extremadamente cruel» con los mayores e hizo a la sociedad comprender «la vulnerabilidad de algunos colectivos», «la importancia de ciertos trabajos» y de «lo público».