La presidenta de la Federación de Anpas de Lugo (Fapacel), Isabel Calvete, ha denunciado el desmantelamiento de la unidad de enseñanza infantil del CPI de Cervantes, donde los niños de tres años tendrán que convivir con otros de hasta diez años.
Así, ha puntualizado que en ese colegio quedan «cuatro niños para infantil, hay previsión de que el curso próximo haya otros cuatro o cinco, pero nos quedan cuatro y como son solo cuatro no tienen derecho a una enseñanza de calidad». «Pedimos a la Xunta que rectifique, no se elimine esta aula, y se discrimine positivamente al rural. El rural hay que tratarlo de otra forma», señala.
Calvete ha subrayado que «si el colegio oferta enseñanza infantil tiene que ubicarlos y lo harán probablemente con los compañeros de los primeros cursos de primaria y sin especialista».
«Entrarán niños de tres años que los metes con niños de ocho, nueve o diez años. No sabemos muy bien como van a hacer el agrupamiento, tendrán que adaptarse y los primeros días estarán llorando, estarán llamando a sus mamas. Es un perjuicio para los niños de infantil y también para los de primaria, y se pueden ver desatendidos», ha augurado.
Lo que ocurre en el CPI de Cervantes es solo un ejemplo, advierte, de los «recortes» que está imponiendo la Xunta de Galicia en la educación, con especial afectación a los municipios del rural.
Isabel Calvete ha avisado de que se rebajará el número de profesores en primaria y secundaria de toda Galicia, y a falta de datos ya adelanta que se reducirá en secundaria en 450 profesores el próximo año en toda la comunidad.