El director adjunto de planificación estratégica de Abanca y coordinador del centro de investigaciones Abanca de Ieside, Pedro Veiga, ha apuntado a mediados de 2022 para que la economía gallega recupere los niveles previos a la pandemia de coronavirus.
Teniendo en cuenta las «incertidumbres» que genera la crisis sanitaria y también los cambios «estructurales» motivados por ella, Veiga se ha referido a previsiones de distintos organismos para pronosticar esta fecha.
Además, en la presentación del informe 2020-2021 sobre la economía gallega de Afundación e Ieside, ha explicado que el impacto «demoledor» de la covid ha sido «menor del esperado».
También ha valorado un ritmo de recuperación mayor en Galicia que en el conjunto estatal, para situar en mediados del año que viene la meta de niveles de PIB «similares a los previos a la pandemia».
«Aprendimos de las anteriores crisis», ha agregado Pedro Veiga, en alusión a «la importancia del sector financiero» y que hubo «volúmenes muy relevantes de crédito», a diferencia de lo ocurrido en 2008. Asimismo, ha apuntado a elevados niveles de ahorro.
Por su parte, el director gerente de Afundación y secretario general de Ieside, Pedro Otero, ha coincidido al apuntar a una «previsible tendencia positiva de cara al próximo semestre», a lo que ha sumado la recepción de fondos europeos.
En su intervención, el investigador del estudio y miembro del Idega de la Universidade de Santiago de Compostela (USC) Juan Ares ha apuntado a un modelo productivo gallego «menos expuesto» al sector turístico.
Por su parte, ha coincidido en que a mediados de 2022 «puede alcanzarse» el nivel previo a la covid, ya que la previsión es crecer un 6-7% este año y el ejercicio pasado el PIB gallego bajó un 8,9%. De todos modos, ha constatado que «puede retrasarse» ese punto puesto que la situación es «cambiante».
La política de ERTE «frenó» la caída del empleo y contribuyó a mantener la tasa de paro, ha expuesto, después de indicar que hubo un «retroceso del proceso de convergencia con la eurozona», pero una convergencia de Galicia respecto a España.
Por sectores, el primario fue el menos afectado, la industria lo fue «mucho» y las actividades de comercio, transporte, hostelería y artísticas y recreativas fueron las más castigadas.
«Las restricciones impidieron el inicio de la recuperación en el primer trimestre de 2021. Conforme se vayan relajando, la actividad se recupera», ha constatado.
En cualquier caso, ha señalado a cambios que serán «duraderos» y supondrán «transformaciones importantes no solo en términos de relaciones laborales».
Qué va a pasar cuando termine 2021 dependerá, así, de lo que suceda en este segundo semestre, si bien las previsiones sitúan la evolución del PIB en el entorno de un crecimiento del 6%.