Investigadores de la Universidade de Santiago de Compostela (USC) han advertido de que una reforestación que no se realice con la planificación y gestión adecuadas puede aumentar el riesgo de incendios forestales.
En un artículo publicado en la revista ‘Global Change Biology’, han señalado la importancia de la planificación del proceso de reforestación dado que, si esta actuación «no se acompaña de una gestión forestal adecuada», puede aumentarse el riesgo de incendios, según ha detallado la USC.
Precisamente, la Unión Europea (UE) prevé plantar 3.000 millones de árboles hasta 2030 en el Pacto Verde, que busca luchar contra el cambio climático, para restaurar hábitats con gran potencial con el objetivo de compensar el aumento del dióxido de carbono vertido a la atmósfera.
Ante esta situación, un grupo equipo de investigadores de la USC, en colaboración con el Centre Tecnològic Forestal de Catalunya, el Research Centre in Biodiversity and Genetic Resources (CIBIO), el Centre de Recerca Ecològica i Aplicacions Forestals de la Universidad Autónoma de Barcelona y el CSIC, han constadado la necesidad de la planificación de estas plantaciones.
«Es decir, (determinar) qué especies (se plantarán) y cómo se gestionarán, aspectos que son claves si queremos ser efectivos reforestando para evitar riesgos asociados a grandes incendios forestales», han insistido.
Aunque han apuntado que la restauración de bosques contribuirá a mitigar el impacto del cambio climático, los investigadores han propuesto distintas alternativas que pueden presentar una efectividad similar o superior, como la diversificación de hábitats o la recuperación de zonas húmedas y pastos, en especial en el sur del continente.