El alcalde de Santiago de Compostela, Xosé Sánchez Bugallo, ha avisado este lunes de que la ciudad entra ahora en un periodo incierto, «interrogante», ya que será esta semana cuando afloren los posibles contagios tras el alivio en las restricciones aplicado por la Xunta de Galicia durante los últimos 10 días.
«Lo que ocurra esta semana será lo que nos marque qué hacer: si nos mantenemos con las mismas medidas, si se permite una mayor apertura o si, por el contrario, las autoridades competentes tienen que dar marcha atrás», ha explicado el regidor.
Sánchez Bugallo ha comentado además los últimos datos de la covid-19 en Compostela, que ha calificado de «muy positivos». «Tenemos los mejores datos desde agosto, con 76 casos activos y una incidencia acumulada de 66 positivos», ha explicado el alcalde.
El regidor compostelano también se ha referido a las sanciones por incumplimiento en las medidas anticovid, y ha llamado a la responsabilidad y la prudencia. Bugallo ha destacado las 13 fiestas en pisos denunciadas a lo largo de todo el pasado fin de semana, así como algunas sanciones a grupos que, excediendo el número máximo para reuniones de no convivientes, no portaban la mascarilla adecuadamente en la vía pública.
EL SELLADO DEL VERTEDERO DE ARÍNS, «IMPRESCINDIBLE» PARA BUGALLO
En otro orden de cosas, Sánchez Bugallo ha informado también en rueda de prensa de los diferentes asuntos abordados en la junta de gobierno, reunida este lunes por la mínima –5 hombres–, debido a la huelga del 8 de marzo, como la petición de autorización a la Xunta de Galicia para que sea la empresa Tussa la que gestione la nueva estación de autobuses.
La junta municipal también ha autorizado a la empresa de telecomunicaciones Jazztel para que continúe con la instalación de la fibra óptica en el casco viejo compostelano, una demanda que Bugallo ha calificado de «histórica» y que espera que se haya satisfecho «en esta primavera, aunque la meta inicial fuese el mes de Semana Santa».
El proyecto de clausura y sellado del vertedero «descontrolado» de Aríns ha sido otro de los asuntos tratados en la reunión, según ha informado el regidor municipal, para lo que se destinarán 1.174.591 euros. Bugallo espera que además del sellado del vertedero, pueda recuperarse la zona como se hizo en otros lugares similares como el Polígono de Costa Vella.
El plan, «imprescindible» para el alcalde, se licitará en cuanto se aprueben los presupuestos municipales, a los que también se ha referido Bugallo para confirmar que «no se prevén retrasos en los plazos de presentación y aprobación», por lo que espera que entren en vigor a principios de abril.