El centro Casa Nuestra Señora de Fátima y Cristo Rey de Crecente (Pontevedra), en el que se administró la primera dosis de la vacuna contra la COVID-19 desarrollada por Pfizer el pasado 5 de enero, ha registrado un brote que afecta a 28 de sus usuarias.
En el boletín de este martes la Consellería de Política Social notificó siete casos entre las usuarias. Sin embargo, fuentes de la dirección de este centro para personas discapacitadas han explicado a Europa Press que el Sergas les ha comunicado que la cifra ha ascendido a 28 tras conocerse los resultados de las PCR realizadas a la totalidad de las residentes, que suman 68.
Las mismas fuentes han vinculado este brote al incremento de casos de coronavirus registrado en esta localidad tras el periodo navideño, cuando ha apuntado que se produjeron desplazamientos procedentes de las ciudades, que presentan una mayor incidencia acumulada que las zonas rurales. Como consecuencia, se ha procedido a aislar a los casos positivos y sus contactos.
Además, han resaltado que en la residencia se trabaja con grupos sectorizados desde marzo con el objetivo de evitar la propagación del virus. No obstante, han incidido en que la discapacidad que presentan las usuarias conlleva dificultades para garantizar el cumplimiento de las medidas de seguridad.
Asimismo, se ha explicado que este lunes se contabilizaban dos trabajadores contagiados, pero que los resultados del test de saliva realizado semanalmente mediante el método ‘pooling’ han permitido detectar otros cuatro casos.