Cuatro personas han sido detenidas en el marco de una operación antidroga realizada por la Guardia Civil en las Rías Baixas que se inició tras un supuesto asalto a una vivienda de Ribadumia (Pontevedra) por dos encapuchados que golpearon y maniataron a los dos ocupantes de la casa. Uno de ellos resultó ser el responsable del atraco, planeado para hacerse con la droga que había en la vivienda.
De ello informa este miércoles la Guardia Civil, que considera los hechos, registrados en diciembre de 2018, como un caso de ‘vuelco’, lo que se entiende cuando se producen robos entre grupos o personas dedicadas al tráfico de drogas.
Así, a finales de 2018, dos personas presentaron una denuncia por un supuesto robo cometido por dos encapuchados en una vivienda situada en el municipio pontevedrés de Ribadumia. Las víctimas aseguraban que los dos asaltantes portaban pistolas y los golpearon, amordazaron y maniataron con bridas para, a continuación, llevarse dinero, joyas y otros objetos de la casa.
Las supuestas víctimas afirmaban que se quedaron maniatadas en el interior de la vivienda y que pudieron pedir ayuda al conseguir uno de ellos zafarse de las ataduras. Presentados los servicios de emergencia en el lugar de los hechos, ambos fueron trasladados a un centro hospitalaria con heridas de diversa consideración.
En ese momento se inició una investigación por parte del Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Cambados, que procedieron a registrar la vivienda asaltada. Las pruebas recabadas, sumadas a las «incongruencias y contradicciones» de los denunciantes, llevaron a los investigadores a sospechar de la posible participación en el episodio de uno de los hombres atacados, así como de una amiga de ambos y que era la principal testigo del caso.
Así las cosas, los indicios apuntaban a la posibilidad de la que la vivienda asaltada fuese usada para traficar con droga, por lo que el morador de la casa fue detenido. Durante el arresto, los agentes se incautaron de varias cantidades de cocaína.
De este modo, la investigación determinó que uno de los supuestos asaltados diseñó un plan junto con otras dos personas para asaltar la vivienda y hacerse con la droga que allí había. Para ello, el primero entró en la casa valiéndose de su amistad con el ocupante de la vivienda. Una vez en su interior, facilitó que los dos asaltantes accediesen al interior y fingió ser víctima del robo.
Los dos autores del asalto fueron identificados y detenidos más tarde. Ambos cuentan con antecedentes por robos con violencia e intimidación y secuestros. Su arresto llevó a la localización de los otros dos implicados en los hechos para su detención.
Los cuatro arrestados residen en distintos puntos de la provincia de Pontevedra y tienen edades comprendidas entre los 20 y los 30 años de edad.