La Guardia Civil investiga a un joven de 26 años vecino de Trabada (Lugo) como presunto autor del incendio de un vehículo hallado calcinado en un bosque próximo a Lourenzá, coche que carecía de seguro e ITV y había huido de un accidente de tráfico.
Según ha informado el Instituto Armado, la Guardia Civil tuvo conocimiento el pasado 11 de agosto a las 20,10 horas de un accidente de circulación en el casco urbano de la localidad lucense de Lourenzá, en el cual uno de los dos vehículos implicados, un turismo de color azul, se dio a la fuga.
Personada la patrulla en el lugar y auxiliado el otro conductor, se iniciaron las gestiones para localizar al vehículo y conductor fugado. Así, los guardias averiguaron la identidad del titular del turismo y localizaron al mismo en un establecimiento de hostelería situado en Lourenzá.
Las misMas fuentes han indicado que coincidía «tanto la vestimenta como la descripción física del conductor huido con las del titular», un joven de 26 años vecino de Trabada. El chico, han destacado las mismas fuentes, negó «ser quien conducía el turismo», asegurando que le habían robado el coche y que desconocía el paradero del mismo, pero que todavía no había denunciado el robo ante las autoridades competentes.
«Tras las varias incongruencias y respuestas erráticas del titular del vehículo implicado en el accidente, se sospecha que huyó del lugar puesto que dicho turismo carecía tanto del seguro obligatorio como de la inspección técnica de vehículos en vigor», ha subrayado la Benemérita.
Por ello, los guardias decidieron crear una línea de investigación en torno a la persona del titular del turismo, quien, además, posee antecedentes policiales por varias infracciones en tema de seguridad vial.
EN EL BOSQUE
De este modo, el jueves día 13 sobre las 21,00 horas, se localizó en una zona boscosa de difícil acceso próxima a Lourenzá un vehículo completamente calcinado, cuya carrocería y número de bastidor coincidía con el vehículo implicado en el accidente y que posteriormente se dio a la fuga, pero que aún no se había interpuesto denuncia por el supuesto robo que afirmaba su titular haber sufrido hacía ya dos días, ha señalado el Instituto Armado.
El viernes 14 de agosto se personó el propietario del vehículo en dependencias de la Guardia Civil con la intención de presentar denuncia por el robo del vehículo, donde fue informado en ese momento, que el turismo había sido localizado el día anterior, totalmente calcinado, y que tras la pertinente inspección ocular, «se desprende que el fuego fue claramente intencionado», han destacado las mismas fuentes.
Asimismo, le señalaron que, «a pesar de haber pretendido borrar cualquier prueba o vestigio, se observa como la llave del coche se encontraba introducida en el bombín del contacto», y que el turismo presentaba daños en la aleta delantera derecha, correspondiendo con el accidente en el que se había visto implicado, «además de haber intentado dejar ilegible el número de bastidor», ha abundado la Benemérita.
Por todo ello, le comunicaron al joven que «existen indicios suficientes para considerar que él es el conductor implicado en el accidente y que la interposición de la denuncia que pretende presentar, podría implicar la comisión de un delito por denuncia falsa», ha indicado la Guardia Civil.
Entonces, el titular y propietario del vehículo manifestó en ese momento*que era el conductor cuando sucedió el accidente, que huyó del lugar por carecer de seguro e ITV y que, tras el siniestro, ocultó el vehículo en una zona apartada, para el día siguiente, de noche y antes de la madrugada salir de su domicilio con una garrafa de gasolina y prenderle fuego al coche, «con la clara intención de que no pudiera relacionársele a él con dicho accidente», han matizado las mismas fuentes.
Por todo ello, se instruyen seis infracciones administrativas en materia de seguridad vial y legislación medio ambiental por el abandono de vertidos incontrolados de residuos peligrosos.