El secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, y el portavoz en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, han escogido este viernes el municipio de Lalín (Pontevedra) para concluir una campaña de las autonómicas marcada por un constante ambiente de tensión debido a las contramanifestaciones con las que se han topado sus mítines.
Con los gritos de los protestantes de fondo, Ortega Smith ha puesto el broche final a la carrera hacia el 12 de julio acusando al presidente de la Xunta y candidato a la reelección por el PP, Alberto Núñez Feijóo, de ser un «fraude personalizado» y un «tramposo», por ser un «nacionalista disfrazado» con políticas «de izquierdas».
«Qué gran fraude eres, Feijóo, qué gran mentira, qué tramposo. Feijóo es una extraña mezcla de lo peor de la izquierda radical y de lo peor del separatismo nacionalista. Y encima con el peligro de que va camuflado de un partido de derechas o de no izquierdas», ha explicado el número dos de Vox.
Además, Ortega Smith ha vuelto a avivar la polémica acusando al todavía titular de la Xunta de hacer homenajes «a ese antirracista y a ese antiespañol de Castelao». «Nosotros queremos hacer un homenaje a esos gallegos que han aportado grandeza a España, como Emilia Pardo Bazán», ha añadido.
La del secretario general de Vox ha sido la intervención que mayor contestación ha generado por parte de las decenas de contramanifestantes, en su mayoría jóvenes portadores de banderas LGTB y la ‘estreleira’ que han mantenido las protestas incluso con un ambiente festivo.
No obstante, tampoco han faltado los insultos y peinetas por parte de los cientos de simpatizantes de Vox que han acudido al mitin. De hecho, Espinosa de los Monteros ha tirado de ironía para empezar su intervención con un «buenos días» hacia los manifestantes: «Menudo madrugón os habéis pegado para venir aquí a las 20,00 de la tarde».
«Estamos aquí para que estos especímenes no se reproduzcan. Solamente con verles ya sabemos que hay un problema grave en la educación», ha dicho a continuación el portavoz del partido de Santiago Abascal en el Congreso.