El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha lanzado un mensaje muy contundente después de que, en los últimos días, se hayan registrado dos rebrotes en Galicia –en Ribeira y la Mariña lucense–, y ha advertido que el coronavirus es una enfermedad infecto contagiosa, por lo que es «obligatorio» comunicar los síntomas y, de no hacerlo, se «incurriría en responsabilidad».
Tras la reunión semanal de su Ejecutivo, que ha regresado a los jueves, el presidente ha advertido que también se incurre en responsabilidad si, tras ser identificado como un contacto estrecho, se negase la relación con el infectado para evitar el confinamiento.
«No podemos estar en una burbuja meses, semestres y años; y Galicia sigue siendo de las comunidades con menos casos, muy por debajo de la media de España. Pero ya tenemos dos brotes y lamentablemente habrá más», ha advertido el jefe del Ejecutivo autonómico, quien ha apelado a la responsabilidad individual y a «actuar con sentidiño».
Pero también ha alertado de prácticas como «botellones nocturnos» en algunas localidades y ha pedido la colaboración de todas las administraciones -en alusión a las entidades locales–.
Asimismo, ha exigido a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado que, igual que se actuaba con contundencia durante el confinamiento, sean «implacables» con quien incumpla las normas y ponga en riesgo la salud pública.