La candidata de Ciudadanos a la Presidencia de la Xunta, Beatriz Pino, ha pedido diálogo en la nueva Ley Educativa con el fin de avanzar en una norma que sirva «para una generación» y se desvincule del ciclo de reformas que se suceden cada cambio de gobierno.
«Necesitamos una Ley Educativa para una generación, no para una legislatura», ha señalado, recordando que la llamad ‘Ley Celaá’ sería la octava ley educativa en 40 años, en caso de aprobarse.
«PSOE y Podemos impulsan esta ley sin haberla debatido ni consensuado con las comunidades autónomas ni con nadie de la oposición, en un momento en el que, más que nunca, hay que sacar la Educación del debate político, cuando hay mucha incertidumbre sobre el año académico de niños y jóvenes».
Pino ha insistido en la importancia de un Pacto de Estado por la Educación, dialogado y consensuado entre todas las fuerzas políticas y profesionales de la sociedad civil, en el que además se deje a un lado el enfrentamiento entre el modelo de escuela pública y concertada.
«El proyecto elimina el criterio de demanda social y relega la escuela concertada a un papel de mera subsidiaria, abriendo la puerta a la eliminación de los conciertos.».
Asimismo, ha apelado a garantizar que se pueda educar en castellano en todo el Estado y asegurar que «no se atropellan los derechos lingüísticos de alumnos y familias en la escuela». En este sentido, ha apostado por reforzar la Alta Inspección Educativa, en lugar de restarle competencias.
«El proyecto quita las competencias de velar por que se cumpla la Constitución a la Alta Inspección Educativa y da esa potestad a los gobiernos autonómicos, en algunos casos nacionalistas, así como la decisión de cuántas asignaturas se imparten en castellano».
FALTA DE RECURSOS
Pino ha incidido además en que el proyecto de Celaá anuncia inversiones que luego no se presupuestan, como es «la gratuidad en la educación infantil»,
«Es paradigmático: se anuncia la voluntad de avanzar hacia ella, pero no se recoge ninguna previsión presupuestaria, lo cual deja la propuesta al albur de la coyuntura económica, crea incertidumbre en las familias y hace dudar sobre la voluntad real del Gobierno de aplicar estas medidas».
Asimismo, se ha referido a los miles de niños gallegos han perdido sus clases, en un territorio en el que el Estado «no ha invertido nada para superar la brecha digital», y ha censurado que el Gobierno «ni siquiera» aporte recursos para que los colegios puedan «comprar productos sanitarios e higiénicos». «No les da el suficiente dinero para planes de refuerzo o para tener más aulas o para pagar el salario de más profesores», ha insistido.