El acoso por internet no es fácil de reconocer. Va a pasar un tiempo hasta que los padres o los educadores se den cuenta de lo que sucede con el chico o chica. Las actitudes de la persona acosada pasan por estados de ánimo cambiante, sobre todo muy agresivos, no existe comunicación fluida con el entorno familiar, temor a ir a la escuela o instituto y un rendimiento escolar muy bajo. Aparte, el uso excesivo de internet durante mucho tiempo y a horas en las que lo menores deberían estar durmiendo. ¿Existen suficientes vías para la prevención? ¿Están implicadas todas las autoridades en la protección de los más nuevos frente al chantaje en la red?

ACOSO, ACOSADOR, ACOSADO Y ESPECTADORES

Antonio Rial, psicólogo con varios años de trabajo sobre el ciberacoso, destaca algo muy importante “no existe a día de hoy una definición clara de ciberacoso ni hay criterios claros para alertar sobre una situación de ciberacoso”. Esto aparece reflejado en el libro Cyberbullying among young people (Ciberbullying entre gente nueva) que editó la UE en 2016. No obstante, el ciberacoso ya está reconocido como delito en varios países.

A preguntas realizadas al Ministerio del Interior, existen tres perfiles que intervienen en el acoso: acosador, acosado y espectadores. Las fuentes de Interior destacan el perfil del espectador como “de vital importancia durante una situación de acoso”. Los motivos son que los espectadores “aplauden y se hacen cómplices del acto de acoso”. Asimismo ayudan al acosador a “ empoderarse y hacer callar a su entorno para reafirmar su figura”. El efecto espectador muchas veces se produce por “una dilución de la responsabilidad de los presentes, no por intención de hacer daño”.

El comportamiento de los “espectadores” con su consentimiento hacia agresión daría pie la una “ vanalización del insulto, la una despreocupación sobre que le está pasando a la persona acosada” dice Antonio Rial. La red permite una persistencia en el tiempo de actitudes acosadoras, de agresiones, y esto se traduce en un consentimiento y aceptación del insulto. “Cuando se toma consciencia del que sucede ya hay un bollo de nieve muy grande” dice Rial.

CIBERACOSO, PREVENCIÓN Y RECUPERACIÓN

Noa Tilve es psicóloga del programa Te quiero+ de la Consellería de Política Social, y sobre el ciberacoso destaca que las familias cuando son conscientes de que un hijo o hija es víctima de este tipo de agresión “la primera reacción es la de parálisis mientras se preguntan como es posible que le esté pasando esto a su hijo o hija”. Mas son muchas las familias que no saber como actuar. “Primero debemos recuperar la persona dañada, porque ese sufrimiento fue mantenido en el tiempo”.

Las denuncias que se presentan a la Policía o Guardia Civil son enviadas a grupos de investigación y atención especializada. Estas acción quedan reflejadas en un Libro de Registro que estará la disposición del Ministerio Fiscal. El trato con menores de edad supone además que se deba dar un tratamiento especial para preservar más aún su intimidad. Por otra parte, también existe la posibilidad de que sea el centro educativo donde curese estudios el menor, quien inicie el proceso para presentar una denuncia.

Después de presentar la denuncia, el Fiscal de Menores tendrá conocimiento de esta denuncia y será quien leve adelante la investigación. En caso que fuera el menor quien denunciara los hechos, los padres o tutores tarde-noche informados de estas investigaciones y denuncia.

CIFRAS Y DATOS EN GALICIA

La Organización Mundial de la Salud (OMS) y UNICEF, emitieron informes sobre lo ciberacoso (cyberbullying) donde las principales conclusiones fueron, primero un aumento del incidente de este tipo de agresión y segundo, que en paralelo a este aumento también se incrementaron las cifras de depresión e intentos de suicidio entre la gente menor de dieciocho años.

Preguntada la Consellería de Educación sobre se existen cifras que aclaren el incidente del ciberacoso entre los escolares, el departamento de Carmen Pomar, remitió a una nota de prensa que indica según un estudio realizado entre la comunidad escolar que las Familias, profesorado y alumnado “califican de bueno el clima de convivencia escolar en Galicia, y consideran que mejoró en los últimos años”. Ninguna referencia al ciberacoso, solo cifras que indicarían un comportamiento “ideal” dentro de las aulas.

“El programa Conéctate impartido por los centro Quérote + intentan ayudar a una mejor educación para lo uso de internet” dice Noa Tilve. “Podemos ayudar a formar el profesorado, establecer mecanismos de control y de derivación, pues nosotros no pertenecemos la Educación”. La derivación implicaría algunos de los pasos indicados, entre ellos poner en conocimiento de los centros y de las familias lo que acontece con el menor.

No obstante, las cifras por ciberacoso no se conocen. “Existen unas estimaciones por parte de las autoridades gallegas que andan entre lo 10 y el 15%, estamos hablando de la mitad del índice de acoso escolar” dice Antonio Rial. Estos datos para los expertos no son verosímiles, pues solo son estimaciones.

“Hay un aumento de victimización de los menores en internet, y esto es un problema muy serio” dice Antonio Rial. La seriedad del problema llevó a la creación de programas por parte de la UE para realizar un estudio europeo sobre ciberacoso y acoso escolar. “El ciberacoso no es una variante del acoso mediante lo uso de plataformas digitales” dice Rial.

¿Y en Galicia? “Antes de suspender las elecciones para abril, Feijóo había anunciado un plan de choque contra lo acoso escolar, luego la conselleira Pomar dice que no hay problemas en ese terreno” apunta Rial, quien pide más concreción a la Xunta. “Realmente no interesa hablar sobre estos problemas, quizás por cuestiones que se nos escapan o no”.

De momento las cifras de ciberacoso en Galicia no se conocen, no hay una respuesta en firme por parte de los departamentos autonómicos implicados y con competencias. Mientras que organismos internacionales avisan de un grave peligro, las administraciones más próximas aun no han tomado cartas en el asunto por lo que se deduce de las declaraciones de expertos y de los anuncios de la propia Xunta de Galicia.