El aeropuerto de Aena Santiago de Compostela ha sido escenario de la desaparición y posterior devolución, un mes más tarde, de un vehículo de las dimensiones de un tractor que se encontraba en un almacén de inertes cuyo acceso está restringido con dos puertas de seguridad.
Los hechos sucedidos en Navidad han sido desvelados por la central sindical CIG, que manifiesta «sorpresa» y «preocupación» por los fallos en la seguridad del aeropuerto y pide que lo ocurrido no se pase por alto. Hay presentada una denuncia ante la Policía, según el sindicato.
Fuentes de Aena han asegurado a Europa Press que se «están recopilando todos los datos e información» al respecto para, posteriormente, «actuar en consecuencia y dirimir las responsabilidades» que haya. No han aclarado, a preguntas formuladas, si ya ha identificado a alguna persona vinculada con el aeropuerto.
Según el relato de CIG, en el aeropuerto hay un espacio de objetos inertes en el que se almacenan los vehículos averiados y, cada cierto tiempo, se abre un expediente para vender esos vehículos como chatarra. En este caso, el expediente se abrió con el número SCQ124/2019 para la revisión y actualización del inventario del inmovilizado del aeropuerto de Santiago, por un importe bruto de licitación de 12.100 euros, que fue adjudicado por 9.075 euros.
LO QUITÓ UN COCHE GRÚA
Así, el 23 de diciembre, personal de seguridad fotografió todo el material para el inventariado y, entre los vehículos, había un tractor de «considerables dimensiones». Días después, añade, y de forma «sorprendente», cuando los interesados en el expediente, acompañados por personal de Aena, fueron a revisar el material, descubrieron que al comparar las fotografías con los vehículos faltaba el tractor.
Para acceder a ese espacio hay que pasar por dos puertas de seguridad que tienen que ser abiertas por el personal de seguridad del aeropuerto. Sin embargo, dice la CIG, el personal «no tiene constancia de que nadie solicitase la apertura del espacio».
Al revisar las cámaras de seguridad, se descubre que para sacar el tractor se empleó un coche grúa al que se subió el vehículo. «Si hasta aquí la historia parecía alucinante, aún lo es más que, en extrañas circunstancias, el 28 de enero por la mañana el vehículo reapareciese en el mismo almacén», añade la central sindical.