La Policía Nacional ha ordenado reforzar los medios de protección de las unidades especiales de lucha contra la delincuencia organizada, concretamente con la dotación y formación en el uso de fusiles de asalto HK G36 y subfusiles HK MP5, para «adecuar la respuesta» operativa a la violencia de las organizaciones ligadas al narcotráfico y el crimen organizado.
Se trata de un plan adoptado por la Comisaría General de Policía Judicial, de la que dependen unidades claves en la lucha contra la delincuencia especializada como Udyco y Greco (Grupos de Respuesta contra el Crimen Organizado), según han confirmado a Europa Press fuentes policiales.
La medida ha sido adelantada por el sindicato Confederación Española de Policía (CEP), que ha valorado positivamente que se haya apostado por la distribución de armas largas, además de «reforzar las capacidades operativas con la adscripción de nuevos medios técnicos y materiales».
El sindicato CEP relaciona esta medida con operativos contra el narcotráfico como el de Isla Mayor (Sevilla) en el que resultó herido de gravedad un agente por un disparo.
En este sentido, también ha respaldado que «ante este nuevo nivel de la amenaza» se haya decidido «programar cursos de formación especializada en el uso del material con el objeto de facilitar el adiestramiento adecuado».
PROTECCIÓN DE LOS AGENTES
«Desde CEP valoramos muy positivamente esta medida y la inmediata apuesta de la Comisaría General de Policía Judicial por la protección de los profesionales de la seguridad pública», ha comentado este sindicato en un comunicado, recordando que habían remitido previamente un escrito solicitando este tipo de refuerzo de medios. .
Este sindicato policial contrasta la medida con la «arriesgada y temeraria tacañería del Ministerio del Interior a la hora de comprar y distribuir armas largas para hacer frente a las agresiones de los delincuentes».
Según la organización policial, en los últimos cuatro años la cifra de subfusiles de asalto adquiridos por la Dirección General de la Policía está en torno a los 2.000, «de los que la mayor parte, 1.250, fueron licitados el año pasado con un esfuerzo inversor de sólo 2,59 millones de euros».

