Los abogados de la dueña de un bar de A Coruña, contra la que un hombre empotró su coche, en el barrio de Os Mallos, para darse luego a la fuga, han reclamado que se mantenga el ingreso en prisión del mismo, decretado tras los hechos por el Juzgado de Instrucción número 3 de A Coruña una vez que fue detenido.
Lo hicieron a las puertas de los juzgados de A Coruña coincidiendo con la declaración de testigos y en relación a la decisión que debe tomar ahora el juzgado sobre si sigue o no en prisión. Por su parte, la dueña del local, Gislene Inacia, ha pedido que sea condenado a «bastantes años de cárcel».
«Tengo el local destrozado y no puedo trabajar», ha apostillado, además de aludir a su estado físico tras los hechos. «Espero que la justicia sea firme y no le deje salir, tengo miedo de salir a la calle», ha sentenciado.
Adrián Borrajo, uno de los abogados de la dueña del bar, que ha comparecido junto a su compañero del caso Eduardo Astray, ha manifestado que se podría enfrentar a penas de «hasta nueve años» por delitos como conducción temeraria y homicidio en grado de tentativa. «Había cinco personas en el local», ha recalcado. Mientras, ha subrayado que «en el caso de que quede libre» pedirán una orden de alejamiento contra el hombre con antecedentes.
EN PRISIÓN PROVISIONAL
Tras los hechos, el juez decretó su ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza al considerar que existe riesgo de reiteración delictiva y de fuga. También tuvo en consideración el arco punitivo de los delitos por los que está investigado que son dos delitos contra la seguridad vial, otro de tentativa de homicidio, en relación con la dueña del establecimiento, y varios delitos leves de lesiones.
En el suceso, ocurrido el pasado 10 de agosto, varias personas resultaron heridas después de que el hombre, vecino de la zona de Betanzos y ex pareja de una de las mujeres que estaba en lugar, empotrase su coche contra un bar en A Coruña y se diese a la fuga.
El mismo produjo sobre las 23.37 horas del sábado en la calle Europa y en relación a un altercado derivado de un discusión anterior. El conductor aceleró varias veces antes de empotrar su coche contra el establecimiento y llevarse por delante la terraza del local, en la que se encontraban varias personas.
Acto seguido, el hombre dio marcha atrás y, al emprender su huida, chocó contra un vehículo que se encontraba estacionado en las inmediaciones. Con todo, no se detuvo y se dio a la fuga para ser, posteriormente, detenido.