Seis jóvenes de entre 22 y 26 años de edad y de varias nacionalidades han sido detenidos por un delito de odio tras atacar «de forma psíquica y física» a unos ciudadanos extranjeros procedentes del norte de África que regentan un local comercial en Lugo.
Según ha relatado la Policía Nacional, han sido arrestados seis jóvenes vecinos de Lugo, a los que les constan antecedentes por diferentes delitos, por unos hechos que sucedieron a mediados de mes en un establecimiento comercial –un ultramarinos– regentado por ciudadanos extranjeros, los cuales cuando estaban en el exterior del mismo cargando mercancía, «fueron increpados por dos varones en la vía pública, con frases discriminatorias y amenazas de volver con más gente».
En ese momento lo pusieron en conocimiento de la Policía Nacional, han indicado las mismas fuentes, que desplazó efectivos al lugar y se hizo cargo de la situación. Así, inició los trámites para localizar a estos dos varones por atacar a los integrantes del citado «grupo étnico», ha apostillado.
Después de la retirada de la patrulla de la Policía Nacional del lugar, volvieron esos dos individuos junto con otros cuatro. Los jóvenes se introdujeron en el local y continuaron «con la hostilidad, discriminación y violencia contra este grupo», han subrayado las mismas fuentes.
La Policía ha incidido en que «actuaban en grupo, con el objetivo común de amedrentar a estos ciudadanos, con claros indicios de polarización según indican los protocolos de actuación en casos de delitos de odio».
Además, «se ratifica la actuación de los ahora detenidos por la violencia e intimidación mostrada al entrar y mantenerse, contra la voluntad del titular del establecimiento público, que altera su actividad y funcionamiento normal», destaca la Policía.
VÍA DE ESCAPE
Los agredidos intentaron repeler la agresión, pero no fueron capaces, ya que los agresores tenían «bloqueada la única vía de escape que tiene el local», han puntualizado las mismas fuentes.
La agresión se convirtió «en manifestaciones y expresiones que buscan causar un mal creíble, de forma airada, ultrajando la dignidad y el honor personal en términos racistas y discriminatorios, junto con actos degradantes y humillantes relacionados con un grupo étnico», concreta la Policía.
Durante los hechos los atacantes «portaban objetos para causar daños a las personas y a los bienes del establecimiento», han incidido las mismas fuentes, rompieron las lunas del local, muebles y diverso material. Para la Policía esta «acción se produjo de forma premeditada y planificada».
Los seis jóvenes detenidos han sido puestos en libertad una vez se les tomó declaración y ha sido informada la autoridad judicial de todo lo acontecido.