La Guardia Civil ha detenido a seis personas e intervenido seis kilos de hachís en el marco de la ‘Operación Thorir’ contra el tráfico de estupefacientes, en la que ha desarticulado una red de tráfico de drogas integrada en su mayoría por ciudadanos residentes en A Mariña lucense. Además, han sido incautados 100 gramos de cocaína, 40.000 euros en efectivo, vehículos y útiles para corte y adulteración de las sustancias.

Así lo ha informado el Instituto Armado, que ha relatado que la operación se inició tras tener conocimiento que servicios de prostitución en la zona podían estar vinculados al consumo de estupefacientes y al tráfico ilícito de estas drogas.

Tras el análisis de movimientos de personas vinculadas a la distribución de estupefacientes durante el confinamiento por la Covid-19, en los que se detectó que se saltaban las órdenes de confinamiento «sin razones ni causas justificativas para su salida, intensificando su actividad ilícita en el momento de la desescalada», hasta tal punto que se suministraban de provincias como Guipúzcoa, de donde procedía la partida «más cuantiosa que precipitó la explotación de la operación», ha destacado la Benemérita.

Tras varios meses de investigación, se logró identificar a los principales integrantes de la red que han sido detenidos y «privados de los beneficios del tráfico ilícito», subrayan las mismas fuentes.

CON SUS HIJAS MENORES

Así, coordinados con el Juzgado de Instrucción Número 2 de Mondoñedo (Lugo), se concretó la primera detención, un vecino de Eibar (Guipúzcoa) de 41 años de edad, quien se dirigía a A Mariña con seis kilogramos de hachís, «perfectamente ocultos en la rueda de repuesto del turismo en el que viaja con tres de sus hijas menores, a fin de ocultar la naturaleza ilícita del viaje ante un posible control Covid.

«Para detectar y acceder al estupefaciente fue necesario un exhaustivo registro del vehículo, en el que participó el Servicio Cinológico de la Guardia Civil», resalta el Instituto Armado.

La persona detenida contaba con la colaboración de los supuestps destinatarios, los cuales barrían la zona al objeto de detectar presencia policial en las entradas a las localidades de A Mariña e indicaban «los mejores días para acceder a la Comunidad autónoma» y descartaban «en los que se sucedieron controles en la autovía A-8», han concretado las mismas fuentes.

En la fase de explotación se procedió a la detención de un vecino de Foz de 36 años de edad, presunto destinatario para su distribución del estupefaciente intervenido y quien se encargaba de las contra-vigilancias policiales.

REGISTROS

Tras estas detenciones se realizó un registro en la vivienda de éste último en el que se encontró más sustancias de las mismas características aprehendidas en la actuación inicial y dinero supuestamente procedente del enriquecimiento ilícito.

En una segunda fase se procedió a la detención de dos vecinos de Foz, de 40 y de 42 años, y un vecino de Barreiros (Lugo) de 43 años. En el caso de estos dos últimos les fueron intervenidos cocaína y hachís, dispuestos para la venta, hallados tanto en el momento de su detención como en los dos registros llevados a cabo en las localidades de Foz y Barreiros.

Precisamente uno de los domicilios de Foz era compartido por estas dos personas como lugar de seguridad y en su trastero hallaron el lugar para el pesaje, corte y distribución en dosis.

FASE FINAL

En la fase final de la operación se procedió a imputar en calidad de investigado a un vecino de La Caridad (Asturias) de 33 años de edad, por haber participado supuestamente en un delito de coacciones, «al compartir con los otros acusados un episodio para recuperar dinero procedente del tráfico de drogas y servicios de prostitución», señala la Guardia Civol.

Tras ser puestos a disposición judicial se ha decretado el ingreso en prisión de cuatro de los investigados y la Guardia Civil considera finalizada esta operación contra el tráfico de drogas en A Mariña.