Agentes de la Policía Nacional adscritos a la Comisaría Provincial de Lugo han imputado a un menor, que se encontraba fugado de un centro, un delito de hurto porque en el momento de su identificación portaba un móvil sustraído y un reloj de origen desconocido.
Así lo ha informado la Policía Nacional, que ha relatado que el menor fue localizado de madrugada cuando deambulaba por la calle Camiño Real, motivo por el que fue identificado. El chico carecía de cualquier documentación que pudiera acreditar su identidad, por lo que fue trasladado a dependencias policiales en la Calle Chantada.
Una vez en comisaría, le interceptaron un teléfono móvil que, al ser comprobado su IMEI a través de los servicios informáticos de la Dirección General de la Policía, figuraba como sustraído y denunciado en esas dependencias policiales. Al mismo tiempo se le preguntó por un reloj que portaba, ante lo que «todas» las respuestas fueron «incoherentes y contradictorias», han puntualizado las mismas fuentes, por lo que se le intervino en espera de continuar las investigaciones sobre el mismo.
El teléfono móvil había sido sustraído el pasado día 27 a otro joven, por el método del tirón, sin causar daño alguno, cuando este caminaba por el centro de la ciudad con el terminal en la mano.
Ya en ese momento el joven que sufrió el robo aportó una fotografía del autor que reconoció a través de las redes sociales. Al mismo tiempo y una vez verificada su identidad, se comprobó que este varón estaba fugado de un centro de menores, por lo que se avisó a la Policía Autonómica para que procediese a su traslado a dicho centro.
De todo ello se informó al Ministerio Fiscal, al que se remitió todo lo actuado.