La Xunta ha ratificado su participación en una declaración conjunta con todas las comunidades autónomas enmarcada en la crisis del COVID-19, mediante la que se acuerdan propuestas imprescindibles de cooperación para «promover el desarrollo sostenible en un mundo complejo, cambiante e interdependiente», según consta en el documento.
Bajo el lema ‘De la crisis se sale cooperando’, la declaración persigue un objetivo común para las 17 comunidades autónomas y los nueve Fondos de Cooperación que suscriben el documento, que es situar «en el centro» el bienestar y la vida digna de todas las personas y futuras generaciones.
Así, según se recoge en el documento, las comunidades autónomas y entes locales apuestan por «consolidar alianzas y consensos políticos y sociales» que permitan a la cooperación continuar invirtiendo y contribuyendo a «garantizar un presente y un futuro sin dejar nadie atrás», con una clara apuesta por el consenso dentro de la política de cooperación para el desarrollo.
En este sentido, y ante los impactos ocasionados por el COVID-19 en las distintas sociedades, que acelerarán sin duda una transformación global tanto a nivel económico, como social y político, desde la cooperación descentralizada se proponen abordar los desafíos existentes desde una perspectiva local-global, que sea coordinada y complementaria.
Entre los acuerdos reflejados en esta declaración conjunta, que responden a retos que se pusieron de relieve con la pandemia, figuran los de «avanzar hacia la sostenibilidad, reforzar lo público, reducir las brechas (también la digital) y la apuesta por lo local».
FORTALECER LA SOCIEDAD CIVIL ORGANIZADA
Por último, apuestan también por el fortalecimiento de la sociedad civil organizada y su participación en el diseño, gestión y evaluación de las políticas públicas, ya que desde su cercanía a las poblaciones más vulnerables pueden garantizar la defensa de sus derechos y que nadie quede atrás, aseguran desde la Cooperación descentralizada.
«La solidaridad internacional es una responsabilidad compartida e imprescindible para garantizar el futuro del planeta», concluye el escrito conjunto.
CAMPAMENTOS DE TINDUF
Junto con la declaración, las comunidades también aspiran a responder a especiales necesidades de los campamentos saharauis de Tinduf y a personas refugiadas palestinas a través de la UNRWA (Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo). Para estas iniciativas concretas, las comunidades autónomas aportan casi 2,5 millones de euros.
Cada comunidad autónoma mantiene sus propias políticas de cooperación y líneas de subvenciones y ayudas. Esta iniciativa conjunta es únicamente un gesto, remarca la Xunta en un comunicado, para «ejemplificar y poner de manifiesto» su compromiso con la solidaridad local global y el papel que las autonomías tienen que seguir desempeñando por la cooperación para el desarrollo.