La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivienda ha repartido esta semana 200 batas y 200 mascarillas de protección entre el personal de 14 centros gallegos autorizados para la recogida de animales abandonados y que están gestionados directamente por alguna entidad protectora.
En un comunicado, el departamento autonómico ha destacado que la medida coincide con la reapertura al público de estas instalaciones tras la entrada en vigor la fase uno en toda la Comunidad gallega.
Las batas entregadas por la Consellería, procedentes de una donación del grupo empresarial Valtalia, están fabricadas a partir de plástico reciclado, especialmente concebidas para tareas de desinfección y que actúan como una segunda capa protectora de ropa. En el lote, además, se incluyeron 200 mascarillas adquiridas por la Xunta.
La Administración autonómica ha recordado, además, que repartió 18.000 kilos de pienso entre los centros, con los que se garantizó el cuidado y la manutención de casi 2.300 perros y gatos abandonados.