El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha admitido que «es muy probable» que el número de casos de COVID-19 en España aumente durante los próximos días y semanas a medida que también se incrementa la realización de pruebas diagnósticas.
«Estamos haciendo un esfuerzo para aumentar el número de test que podamos hacer de PCR, complementadas por los test rápidos. Conforme vayamos testando a más gente nos permitirán ver si hay más población infectada. Es muy probable que a más test, más número de casos notificados. Esto es muy probable, ojalá no sea así», ha señalado durante su comparecencia semanal en la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados.
El ministro ha defendido que España «sigue estando en uno de los niveles más altos de ejecución de PCR, la prueba más fiable». Según los datos que ha aportado, se han realizado más de 930.000 pruebas de este tipo desde el inicio de la epidemia hasta el 13 de abril, lo que suponen unas 40-47-000 diarias. En cualquier caso, ha avanzado que el Gobierno «está trabajando en varias direcciones para aumentar todavía más la capacidad» y llegar a las 50.000 al día, aunque ha puntualizado que esto «va a llevar un tiempo».
El ministro ha apuntado que el Ministerio de Sanidad va a intentar tener «información más precisa» sobre la cantidad de PCR y test rápidos realizados diariamente. «Nos gustaría tener información diaria de las comunidades autónomas, a veces no es fácil porque se hacen desde muchos centros. Se lo hemos pedido ya a las CCAA Tener información verídica y de forma contrastable no es fácil», ha detallado.
En cuanto a las cifras de fallecidos, ha insistido en que «España está cumpliendo con una definición de caso muy estricta, en línea con lo que dictan las autoridades internacionales». «Toda persona diagnosticada y fallecida es computada como fallecida por COVID-19. Otro tipo de consideraciones no estarían en línea con lo que nos exigen estas definiciones de caso internacionales», ha añadido.
Por último, sobre el número de profesionales sanitarios, que ya representan más de 28.000 casos desde el inicio de la epidemia en España, ha admitido que «sigue siendo una preocupación» para las autoridades sanitarias, aunque ha apostillado que esa cifra es total, y no representa el número de contagiados a día de hoy, ni tampoco los que están fuera de su actividad laboral por el COVID-19. En cualquier caso, ha recordado que se ha acordado con las CCAA realizar un análisis más detallado de estos datos de contagios entre sanitarios.