Los casos leves de coronavirus se van a poder seguir en los domicilios y se van a realizar pruebas para detectar el virus a las personas con neumonía o casos de infección respiratoria grave ingresadas en los hospitales, según han acordado el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), convocado de forma extraordinaria por el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y donde se ha aprobado un nuevo protocolo de actuación.
Se trata de dos medidas contempladas en el nuevo protocolo elaborado por el Ministerio de Sanidad, y que ha sido aprobado por las comunidades autónomas, y en el que también se señala que los ciudadanos de las zonas italianas de Lombardía, Piamonte, Emilia-Romaña y Véneto, así como los de Japón, Irán, Corea del Sur y Singapur, sean considerados pacientes de riesgo.
Al mismo tiempo, aquellas personas que tengan una infección respiratoria aguda serán consideradas como sospechosas o ‘casos en investigación’, siempre y cuando hayan estado en las zonas de riesgo en los 14 días previos al inicio de los síntomas o hayan tenido contacto con un caso confirmado o en estudio.