Galicia arrancó el año 2020 con un mes de enero cálido en el que las precipitaciones se repartieron de forma heterogénea y se movieron en los parámetros esperados al registrarse solo un 4,3% de lluvias.
Así lo destaca Meteogalicia en su balance del primer mes del año, que estuvo caracterizado por la sucesión de anticiclones que, con todo, se vieron interrumpidas por borrascas «particularmente activas» a mediados y finales de enero.
Los primeros días del año fueron especialmente fríos, pero los termómetros acabaron superando ligeramente la media para este año, según apunta el informe de Meteogalicia publicado este jueves.
De este modo, la media se situó en 0,6 grados por encima de los valores históricos, valores similares a los registrados en enero de 2018 y que contrastan con las temperaturas del mismo período de 2019.
El oeste de Lugo fue la región de Galicia con valores más elevados en los termómetros al registrarse 2 grados centígrados por encima de la media. En el extremo contrario se situó la zona de la ría de Noia, la más fría de Galicia en enero.
PRECIPATICIONES
En cuanto a las precipitaciones, Meteogalicia cifra en un 4,3% por encima de las previsiones de las lluvias registradas en las 16 estaciones más representativas de la comunidad. Así las cosas, los niveles registrados en enero de 2020 están en los baremos similares a los del período histórico 1981-2010.
Las lluvias caídas en enero se concentraron en pocos días al ser fruto de frentes muy activas. De hecho, en algún punto de Galicia bastaron solo tres días para recoger todas las precipitaciones de enero.
Por zonas, la distribución de las lluvias fue «muy desigual» de modo que en la mitad noroeste se duplicaron los valores considerados normales, mientras que en la mitad sureste hubo localidades que registraron un 60% menos de precipitaciones.