La Audiencia Provincial de A Coruña ha suspendido de nuevo el juicio previsto para este martes y miércoles contra ocho personas por maltratar a una mujer que trabajaba en un club, exigirle dinero y retenerla contra su voluntad.
La incomparecencia de uno de las cinco personas que este martes se sentaban en el banquillo de los acusados -tres de ellos están en estado de rebeldía- ha motivado la suspensión de la vista, cuya nueva fecha ha sido fijada para el 5 y 6 de mayo.
Entre los imputados figura el excompañero sentimental de la afectada, para el que la Fiscalía demanda 19 años y 9 meses de prisión. Para el resto, solicita penas de cinco y tres años de cárcel.
A ellos se le imputan delitos por malos tratos, extorsión, detención ilegal y lesiones. Los hechos, según recoge el escrito de Fiscalía, se remontan al año 2017.
En él, señala que el principal acusado mantenía una relación sentimental con una mujer, a la que maltrataba físicamente y obligaba a ejercer la prostitución por varios clubes de alterne. Además de «golpearla de modo frecuente con las manos», exigía a la víctima que le entregase el dinero procedente de su actividad en los clubes bajo amenazas de que sería agredida en caso de no hacerlo.
La víctima era trasladada de un club a otro por el hombre, que recibía ayuda por parte de las otras personas encausadas. De un prostíbulo de Lugo la trasladaron a Betanzos (A Coruña) y, durante el trayecto, el principal imputado agredió a su entonces pareja, según el escrito de Fiscalía.
TURNOS PARA VIGILARLA
En Betanzos, añade, fue retenida durante cinco días en una vivienda en la que residía una pareja que también es juzgada. Además, explica que los acusados hacían turnos para impedir que la víctima saliese de la casa.
Esta situación terminó, según el escrito del Ministerio Fiscal, cuando la joven convenció a su pareja para reanudar su relación sentimental.
Sin embargo, en octubre de 2017, continuaron las exigencias para que ejerciese la prostitución en un club*y entregase el dinero que obtenía por ello.
También sostiene que acudieron a uno de estos locales y la obligaron a introducirse por la fuerza en el coche. La víctima fue llevada a una vivienda situada en Sigüeiro, en Oroso (A Coruña), donde residían otras dos personas que también se enfrentan a peticiones de cárcel.
Allí, permaneció retenida dos días hasta que fue liberada por los residentes en el domicilio «al tener conocimiento» de las noticias publicadas en los medios de comunicación.