Una pareja ha sido condenada a 480 euros de multa –240 euros cada unos– y a seis meses de inhabilitación para tener mascotas por un delito de maltrato animal al perro (Yanko) con el que convivían en una vivienda de la calle Xulia Minguillón de Lugo.
En el fallo, con fecha del 16 de diciembre, se acuerda también el «decomiso definitivo» del perro, al tiempo que se impone a los responsables el pago de las costas procesales. La denunciante había sido la Sociedad Protectora de Animales de Lugo y contra la sentencia cabe recurso de casación.
En una sentencia de seis folios, el magistrado de refuerzo del juzgado de instrucción número uno considera acreditado que la pareja tuvo al perro encerrado durante meses sin salir a la calle, así como en condiciones de malnutrición.
El condenado aseguraba en su declaración ante la Policía que residía con su pareja «como ocupas en esa vivienda», mientras el perro «no sale nada a la calle y hace sus necesidades en el patio trasero del edificio y a veces en alguna habitación».
De este testimonio se deduce que «los denunciados tenían al perro sin salir de la vivienda a la calle, ni siquiera para hacer sus necesidades».
Entre otros testigos, un lacero ha descrito «que los excrementos (del perro) que había dentro de la vivienda eran de varios meses y estaban resecos».
Así, queda «acreditado el riesgo de menoscabo o perjuicio» a la integridad física del animal, «como es la patología psíquica de fobia social y miedo intenso».
AVISO DE UNA VECINA
Entre otras declaraciones, se toma en consideración la de una mujer «que veía un perro todos los días, aparentemente bien, lo veía pasar y estaba solo al lado de la ventana», pero después lo veía «desnutrido, flaco y también tenía moscas grandes y gordas, siempre solo, sin comida».
A la vista de este escenario optó por avisar a la Policía Local, que le dijeron que «se encargaban ellos». Después escuchó «un golpe muy fuerte, entraron los policías y el perro saltó por la ventana, cayó y casi lo atropellan».