La Audiencia Provincial de Lugo condena a cuatro años y medio de cárcel a un hombre por violar a una mujer que trabajaba en su domicilio para cuidar de su madre.
La sala lo considera autor de un delito continuado de agresión sexual y de un delito de violación. Además de la pena de prisión, le impone el pago de una multa de 3.780 euros y de una indemnización de 10.000 euros.
Los magistrados consideran probado que el acusado realizó tocamientos no consentidos a la víctima en varias ocasiones y que, en un momento posterior, la violó. La defensa del sospechoso solicitó su absolución, alegando que los actos fueron consentidos.
Sin embargo, el tribunal valora el testimonio de la víctima como «coherente y preciso», al tiempo que destaca que «no incurrió en ambigüedades, generalidades o vaguedades».
A ello añade que su relato fue «persistente», sin que aprecie «ninguna contradicción en lo esencial que desmerezca su crédito». Además, descarta que obrase «motivada por un ánimo espurio que le llevase a denunciar falsamente».
Dicho testimonio, además, fue corroborado por pruebas forenses y declaraciones de testigos, por lo que los magistrados concluyen que el acusado actuó sin el consentimiento de la víctima.
La sentencia no es firme, pues cabe presentar recurso ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG).

