El personal de Atención Primaria en Galicia está llamado a huelga el próximo 26 de noviembre –desde las 08.00 horas de ese día hasta las 08.00 del jueves– para pedir una mejoría de sus condiciones laborales y la «retirada inmediata» de las medidas presentadas por la Xunta en la mesa sectorial.
«Estamos ante una agresión de una magnitud suficientemente grande como para necesitar una respuesta contundente por parte de las organizaciones sindicales», ha criticado el secretario nacional de CIG-Saúde, Manuel González. Este es uno de los sindicatos que impulsa el paro, además de CC.OO., UGT y CSIF, las organizaciones representadas en la mesa sectorial.
El mismo día de huelga se celebrará una manifestación en Santiago, delante del Servizo Galego de Saúde (Sergas), a las 11.00 horas. Además, en los días previos, el 18, 19 y 20 de noviembre se celebrarán concentraciones de 15 minutos a las puertas de los centros de salud y PACs a las 11.00 y 18.00 horas; el 19 también habrá una concentración delante del Sergas a las 11.00 horas.
En función del avance de las negociaciones, las organizaciones cuentan con un calendario para continuar las movilizaciones en caso de que lo considerasen necesario. «Si el 26 no tenemos una respuesta en positivo a las demandas, continuaremos con una hoja de ruta», ha avertido González.
Una de las principales reivindicaciones, entre un total de 17 medidas, es la retirada de la categoría de facultativo especialista de Atención Primaria (FEAP), creada en 2022, que obliga a estos médicos, además de trabajar en un ambulatorio, a cubrir al menos dos guardias mensuales en puntos de atención continuada (PAC).
«En los años que lleva puesta en marcha, ya demostró que no aportó nuevos profesionales ni fue una acción atractiva para los profesionales que se incorporaban al sistema para trabajar. Lo que pretenden ahora es extenderla a todos los puestos de Medicina de Familia», ha afeado.
Una de las propuestas de la Xunta llevadas a la mesa sectorial del 17 de octubre pretende reconvertir todas las plazas vacantes de esta categoría en FEAP. «Quieren que los pocos profesionales que tenemos hagan más trabajo», ha criticado el representante de CIG-Saúde.
Entre las demás demandas, exigen que se negocio en la mesa sectorial el Plan de Ordenación de Recursos Humanos en un plazo máximo de seis meses, con especial énfasis en la adecuación de las ratios y el abordaje de la situación del personal administrativo.
Además, los sindicatos han reivindicado el «papel fundamental» del profesional de Enfermería, que tienen que ver «potenciada su presencia»: «No puede ser que tengamos profesionales de enfermería familiar y comunitaria trabajando en otras áreas diferentes a Atención Primaria».
Una de las mejoras que piden para este colectivo es el desarrollo de un concurso específico de la especialidad de enfermería familiar y comunitaria y la negociación de un plan plurianual de reconversión de plazas generales en plazas de especialista.
PACS «ABANDONADOS»
«Los PACs están totalmente abandonados», ha subrayado el representante de UGT, Javier Martínez. Varias de las demandas recogidas por los sindicatos versan sobre estos puntos, que cuentan con un marco laboral «precario»: «La jornada de este personal sigue siendo una asignatura pendiente».
A este respecto, piden que se regule que al personal de PACs se le abonen las prolongaciones de jornada realizadas en los centros de salud con la cantidad equivalente al valor de la modalidad de prolongación de jornada realizada.
Los sindicatos exigen que se estudie la carga asistencial de los puntos, teniendo en cuenta la dispersión, el número de movilizaciones por el 061 y la distribución etaria, y que se realice una dotación consecuente de personal a esas circunstancias.
Además, demandan que se incremente el valor de la jornada complementaria del personal enfermero de PAC y la indemnización por manutención del personal.

