El Ministerio Fiscal ha solicitado una pena de dos años y de un año y medio respectivamente para dos hombres acusados de agredir a una pareja en Ourense por un presunto delito de robo con violencia e intimidación.
En concreto, según recoge el escrito fiscal, el 22 de mayo de 2022, alrededor de las 4.30 horas de la madrugada, mientras la pareja se encontraba regresando a casa, fueron abordados por tres hombres, los dos acusados y un tercero que no a sido identificado, para pedirles dinero.
Al negarse ambos denunciantes, el grupo comenzó a increparlos y amenazarlos, empujando a uno de ellos y, una vez en el suelo, comenzaron a golpearlo y darle puñezatos. Al presenciarlo la segunda denunciante, pareja del primero, esta intentó frenar la agresión contra su marido, pero fue empujada también contra el suelo por uno de los acusados.
Según ha ratificado una de las denunciantes durante el juicio celebrado este martes en el Juzgado de lo penal de Ourense, tras caer al suelo, visualizó las luces de un vehículo de la Policía Local y se aproximó para pedir ayuda, pero al ver que los agentes se trasladaban a la zona, los tres acusados huyeron.
A pesar de que la denunciante ha alegado no recordar cuál fue el motivo de la agresión, ha sostenido que los acusados dijeron «algo relacionado con robar» y afirmaron acercarse para ofrecer auxilio pensando que esta estaba siendo agredida por su pareja. Sin embargo, su marido ha asegurado que los tres acusados les increparon pidiendo que «les dieran todo lo que tenían».
LOS ACUSADOS
Por su parte, ambos acusados han sostenido su inocencia, alegando que no conocían a los denunciantes. En concreto, uno de ellos, que cuenta con antecedentes penales y ha declarado por videconferencia desde un centro penitenciario, ha sostenido que durante la noche de los hechos vio al segundo acusado con una chica pero no llegó a hablar con él.
En esta línea, ha relatado que fue abordado por un agente de la Policía Local, que solicitó su documentación y le pidió que mostrase sus nudillos, pero no llegó a detenerle porque «vio que no tenía nada en las manos». Así, el acusado ha negado su participación en los hechos y ha afirmado conocer la identidad de los implicados, amigos de este.
Sin embargo, el segundo acusado ha sostenido que sí se encontró con el primer acusado, mientras este estaba retenido por la Policía Local, y que incluso le preguntó si «había pasado algo» y si «necesitaba que llamase a sus padres».
Según relata, fue entonces cuando los agentes lo abordaron a él también para solicitar su documentación y que le mostrase los nudillos, sin llegar a detenerlo, hasta que días después fue llamado a declarar. En la misma línea, el segundo acusado, que ha testificado en persona, ha mantenido no conocer a los denunciantes y no tener «ninguna interacción» con ellos durante la noche.
PRUEBA TESTIFICAL
Asimismo, ha sido citado a declarar uno de los agentes de la Policía Local que acudió a la zona de los hechos después de ser abordado por una de las víctimas. En su testimonio ha explicado que, mientras realizaba labores de patrulla con su compañero, una chica acudió «pidiendo ayuda» porque un grupo de jóvenes «estaban pegando a su novio».
En esta línea, el agente ha señalado que los acusados ya habían huído cuando ambos se aproximaron al segundo denunciante, que les facilitó información sobre las características de los acusados. Así, los agentes informaron a otra dotación policial que se encontraba patrullando a pie, que «interceptó a unos individuos que coincidían con esas características».
Ha sido llamado a testificar, además, el instructor de las actas de declaración y reportaje fotográfico del atestado y que participó también en la detención de uno de los acusados, que ha señalado que ambos denunciantes «hicieron el reconocimiento por separado», identificando a los dos acusados.
Una cuestión que también han defendido ambos denunciantes, que han asegurado que en el momento del reconocimiento, ambos identificaron «a las mismas personas» y «no tuvieron duda».
CONCLUSIONES
Así, Fiscalía ha mantenido su petición de condena de 2 años de prisión y de un año y seis meses de prisión respectivamente para los acusados, así como una indemnización a la mujer denunciante con 203 euros, al considerar la existencia de «numerosas contradicciones» en el relato de ambos acusados y una prueba testifical que ha dejado «más que acreditada» su culpabilidad.
Por su parte, las letradas de la defensa han solicitado sentencia absolutoria para ambos acusados, al sostener que ha quedado «probado y acreditado» que estos «no han tenido participación en los hechos», recalcando que personas «con características similares» a las de los acusados «hay 200 en Ourense».

