Un total de 420 voluntarios han colaborado, hasta el momento, en acciones –impulsadas por la Xunta directamente o en colaboración con otras entidades, como ABANCA– para prevenir el arrastre de cenizas por la lluvia y alimentar a la fauna silvestre en las zonas que se han visto afectadas por los fuegos del pasado verano.
La conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, se ha desplazado este sábado a Cualedro (Ourense) para participar en esta iniciativa, organizada en el marco del plan especial diseñado por la Xunta para contribuir a la protección y recuperación de aquellos ayuntamientos afectados y que cuentan dentro de su territorio con espacios amparados bajo alguna figura de protección.
Según ha explicado, el objetivo de estas acciones es dar una respuesta rápida a dos de los principales efectos de los fuegos. Por un lado, prevenir los problemas hidrológicos, de erosión y de contaminación de los suelos a través de la técnica del ‘mulching’. Esta consiste en la colocación de acolchados de paja, fibras de madera y otros materiales para crear fajas protectoras en zonas afectadas por el fuego y con pendientes elevadas.
Por otro lado, los voluntarios también realizan tareas de distribución de alimento para la fauna silvestre de las zonas afectadas por el fuego. En concreto, se han repartido más de 75 toneladas de paja, hierba y cereales.
COLABORACIÓN ENTRE MEDIO AMBIENTE Y XUVENTUDE
Esta acción, con un presupuesto de 216.000 euros, está promovida por la Consellería de Medio Ambiente e Cambio Climático en coordinación con la Consellería de Cultura, Lingua e Xuventude.
En concreto, Medio Ambiente hace la selección de los lugares –a propuesta de los ayuntamientos– y determina las acciones a realizar en cada caso; transporta y facilita todo el material necesario para realizar las intervenciones; asume sobre el terreno la coordinación y asesoramiento de los voluntario, y cubre los gastos de su mantenimiento y alojamiento durante las jornadas de trabajo.
Por su parte, Cultura, además de encargarse de la difusión de estas acciones y de la inscripción en línea, selecciona y organiza los distintos grupos de voluntarios y contrata los correspondientes seguros para cubrir a los participantes.
VOLUNTARIADO DE ABANCA EN O INVERNADOIRO
Al mismo tiempo, cerca de 40 personas voluntarias convocadas por ABANCA y Afundación han participado este sábado en una jornada de voluntariado ambiental en el Parque Natural do Invernadoiro y sus zonas colindantes, fuertemente castigadas por los fuegos del verano. La acción forma parte del Plan de Acción contra los incendios puesto en marcha por el banco y su Obra Social en agosto.
Tal y como informa la entidad, los voluntarios y voluntarias, divididos en varios grupos, trabajaron a lo largo de toda la mañana en las cercanías del centro de recepción de visitantes, así como en otros lugares de difícil acceso y mayor altitud.
Parte del colectivo dedicó sus esfuerzos a la recogida de semillas que serán empleadas, en los próximos meses, en actuaciones de repoblación en lugares próximos al parque afectados por el fuego. En concreto, trabajaron en la cosecha de granos de serbal de cazadores, una especie que abunda en Galicia, sobre todo en las montañas orientales.
Otro grupo se desplazó hasta las zonas más elevadas y pendientes de la parte oriental del parque para realizar trabajos de ‘mulching’. Además, y como complemento la estas dos actividades, se instalaron ‘stands’ refugio de madera destinadas a aves y murciélagos; y se realizaron acúmulos de cereal y piedras de sal destinados a la alimentación de la fauna silvestre.
La de este sábado ha sido la tercera actuación en apenas dos semanas del voluntariado de ABANCA y su Obra Social, tras las realizadas hace tan solo unos días en el Ayuntamiento de Manzaneda, en los entornos del Rego de la Mourela en Placín y el Arroyo del Rial en Cabeza de Manzaneda, en las que participaron más de 150 personas llegadas de diferentes lugares de Galicia.

