El conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, ha dicho que confía en alcanzar un acuerdo con los sindicatos Simega y O’Mega antes de la huelga de médicos que anunciaron para el próximo 3 de octubre, aunque ha señalado que algunas reivindicaciones «trascienden» a lo que puede hacer una comunidad autónoma y son competencia del Ministerio de Sanidad.
En declaraciones a los medios antes de participar este miércoles en una jornada sobre prevención del suicidio en Santiago, Gómez Caamaño ha prometido analizar «meticulosamente» las peticiones de ambas organizaciones y, «si son razonables, realistas, factibles y oportunas», intentar llegar a un consenso en el que «las dos partes estén confortables».
Simega y O’Mega explicaban esta semana que la huelga no solo busca un «convenio franja específico» para los médicos del Servizo Galego de Saúde (Sergas) que encaje en el estatuto marco que se negocia a nivel estatal, sino que también exigen una limitación de agendas en atención primaria y el establecimiento «efectivo» de la jornada de 35 horas pactada en 2023 con la Consellería.
En este contexto, pese a que las dos organizaciones insistieron en apelar a la Administración autonómica, Gómez Caamaño ha explicado que «muchas cosas están fuera del marco de actuación» de la Xunta, en referencia al estatuto marco; si bien en otras, como la reducción de jornada, están «trabajando» y «hablando».
«Todas las medidas que sean proteger los derechos de los trabajadores, de los profesionales sanitarios, la Consellería de Sanidade va a estar ahí», ha prometido.