El subdelegado del Gobierno en la provincia de Pontevedra, Abel Losada, ha defendido la actuación policial «proporcionada e impecable» en la llegada de La Vuelta a Mos este martes, una llegada que tuvo que adelantarse en 8 kilómetros debido a las protestas propalestinas de activistas que se concentraron en el Alto de San Cosme y en otros puntos de la carrera.
Tras lo sucedido, Losada ha manifestado su «condena» por la interrupción de la etapa de La Vuelta debido a la «ocupación del espacio público» por los manifestantes, aunque ha insistido en trasladar su apoyo «al libre derecho de manifestación y reunión para transmitir la solidaridad del pueblo español con el sufrimiento del pueblo de Palestina, que está padeciendo un genocidio execrable».
«Esa es la opinión de la inmensa mayoría de los españoles, comenzando por su Gobierno y su presidente, Pedro Sánchez. De esto hay pocas dudas. Por eso no comprendo que algunos de los manifestantes en el Alto de San Cosme gritasen cómplices a los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que tuvieron una actuación proporcionada e impecable», ha proclamado el subdelegado, que ha recordado que esos mismos agentes de Policía Nacional y Guardia Civil han estado colaborando hasta hace unos días en la lucha contra los incendios forestales que asolaron Galicia y estuvieron también cooperando con los afectados por la Dana de Valencia.
Abel Losada ha reiterado que la actuación del dispositivo, compuesto por casi medio millar de guardias civiles y policías fue «medida, justa y muy profesional», y ha trasladado su «orgullo» por dicha actuación, felicitando expresamente a todos los agentes y sus mandos.
«RÉDITO POLÍTICO»
Por otra parte, ha afeado la actitud de «provocación» de algunos dirigentes del PP, y se ha referido a la alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo, y al presidente de la Diputación de Pontevedra, Luis López.
La regidora de Mos publicó en sus redes sociales un mensaje en el denunciaba que la Subdelegación del Gobierno «no estuvo a la altura» para garantizar la seguridad en La Vuelta, «una de las mejores pruebas deportivas del mundo», mientras que sí actuó correctamente la Policía Local del municipio. Igualmente, condenó la actitud «irresponsable» de quien «llamó y alentó a la violencia»: «Mos no merecía esto. Llevábamos mucho tiempo trabajando para mostrar lo mejor de nuestro municipio y no podemos permitir que la violencia gane nunca».
Mientras, el presidente de la Diputación y presidente provincial del PP, Luis López, manifestó también a través de redes sociales su acuerdo con la libertad de expresión y el derecho a manifestarse, pero rechazó el «boicot» y poner en riesgo la «seguridad». Asimismo, señaló que «lo que hoy es Gaza, ayer era otro problema y mañana será cualquier otro», porque «lo que importa es agitar siempre una pancarta» y apuntó directamente al BNG y al «radicalismo» por lo ocurrido en Mos.
OPERARIOS MUNICIPALES PARA BORRAR BANDERAS
Ante estas manifestaciones, Abel Losada ha pedido «sentidiño» a los dirigentes del PP «que parecen empeñados en sacar rédito político a toda costa de estas manifestaciones». «No parece haber sido una buena idea borrar las banderas palestinas de las carreteras con pintura negra enviando a operarios municipales. Y no parece una idea muy feliz culpar a esta subdelegación de lo sucedido. No entiendo muy bien si la señora alcaldesa de Mos pretendía que este humilde subdelegado hubiera ordenado cargar contra la gente que portaba banderas y mensajes contra un genocidio», ha ironizado, y ha pedido a Nidia Arévalo «que lo aclare».
Con respecto a lo dicho por Luis López, ha subrayado que «los manifestantes están con las pancartas que consideran». «Provocar, azuzar, meter el dedo en el ojo al que piensa distinto y está legítimamente indignado con el genocidio que se está perpetrando en Gaza, no es un buen camino», ha incidido.
Finalmente, también ha condenado las declaraciones del diputado del BNG, Néstor Rego, por mostrarse «orgulloso del corte de la carretera y la interrupción de la etapa de La Vuelta». «Me parece un error, porque se puede expresar el dolor y la repulsa por este genocidio sin alterar el orden público ni sobre todo poner en peligro la seguridad de las personas», ha sentenciado.