Izquierda Unida (IU) ha pedido al Gobierno que el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) se coordine con el Centre National de la Recherche Scientifique (CNRS) –órgano homólogo en Francia— para participar en la investigación que está realizando la entidad francesa sobre la localización de 3.000 bidones que contienen toneladas de residuos radiactivos en la Fosa Atlántica, a menos de 700 kilómetros de la costa gallega.
Así lo ha hecho saber el partido en una pregunta a la mesa del Congreso en la que en interroga a los responsables del Ejecutivo si se ha realizado alguna evaluación más que determine si se ha producido algún tipo de filtración de material radiactivo de los bidones y analizar, en su caso, cuál es «su impacto actual en el ecosistema marino y la salud pública».
«Según estudios recogidos por múltiples fuentes periodísticas, a lo largo de la segunda mitad del siglo XX la industria nuclear de países como Francia, Reino Unido, Holanda o Suiza arrojó en la Fosa Atlántica cerca de 220.000 bidones con más de 142.000 toneladas de basura radiactiva. Ahora, el proyecto bautizado como ‘NODSSUM’ que coordina el CNRS, donde participa el departamento de Geología de la Universitat de Girona, ha completado la primera fase en la zona para analizar el estado de los bidones y estudiar qué repercusión han tenido o pueden tener en el futuro sobre el ecosistema marino», añade IU en el documento recogido por Europa Press.
Así, el partido señala en su iniciativa a partir de los datos recabados que el contenido de los bidones incluye, pero no se limita, lodos, componentes metálicos contaminados, resinas de intercambio iónico y equipamiento de oficina.
Añaden que los materiales radiactivos fueron encapsulados en bitumen o cemento para soportar las condiciones de alta presión en el fondo marino, pero no existe certeza de por cuánto tiempo.