La Xunta ha activado la situación de prealerta por escasez moderada de agua en los sistemas del río Lérez, en la provincia de Pontevedra, y del río Grande, ría de Camariñas y Costa de A Coruña hasta el Anllóns, por lo que hasta una veintena de municipios de estas zonas deberán realizar un uso lo más responsable posible del agua, evitando actividades como el llenado de piscinas o el riego con agua potable.
Así lo ha acordado este jueves la Oficina Técnica da Seca, que ha estado presidida por vía telemática por el director de Augas de Galicia, Roi Fernández, y en la que participaron también representantes de Protección Civil, de MeteoGalicia y de las Consellerías de Sanidade y Medio Rural.
En concreto, se trata de las localidades de Barro, Bueu, Campo Lameiro, Cerdedo-Cotobade, A Estrada, Forcarei, Marín, Meaño, Moraña, Poio, Ponte Caldelas, Pontevedra y Sanxenxo, en el caso de la UTE río Lérez; y Cabana de Bergantiños, Camariñas, Laxe, Muxía, Vimianzo y Zas, pertenecientes del río Grande.
Además, durante la reunión también se ha acordado aplicar medidas equivalentes a un escenario de prealerta (sin llegar a declararla) en el subsistema de Baiona, perteneciente a la unidad territorial río Verdugo y desde el cual se abastece a la población de este municipio pontevedrés.
(HABRÁ AMPLIACIÓN)