La magistrada Ana María del Carmen Blanco Arce se ha referido a su toma de posesión este jueves como presidenta de la Audiencia Provincial de Ourense como reflejo del «cambio social y jurídico» en esta provincia, puesto que es la primera mujer que ocupa este cargo. «Avanzamos con dificultades, pero a paso firme», ha proclamado.
Antes magistrada de la Audiencia Provincial, Blanco Arce fue elegida para el cargo de presidenta el pasado mes de junio por unanimidad en el pleno del Consejo General del Poder Judicial, frente a otros dos candidatos, Leonardo Álvarez, juez decano de Ourense, y Luis Doval, magistrado de la Audiencia Provincial de Lugo.
En su toma de posesión, ha abogado por «contribuir al servicio público de la justicia y reforzar la confianza de la ciudadanía en sus instituciones», señalando como uno de los retos principales la «modernización del sistema judicial» para adaptarse a la reciente ley de medidas en materia de eficiencia del servicio público de justicia.
A su juicio, esta es una legislación que precisa «plantillas reforzadas, no reducidas», así como «diálogo institucional, rigor técnico y, especialmente, compromiso político», en un acto al que asistió, entre otros, el alcalde de la ciudad, Gonzalo Pérez Jácome.
TRAYECTORIA
Con casi 40 años de trayectoria profesional, María del Carmen Blanco ya se había postulado en el año 2020 para ejercer este puesto, pero la presidencia fue adjudicada entonces a Antonio Piña Alonso, quien presentó su renuncia en octubre de 2024 para trasladarse a la Audiencia Nacional.
Ahora, Blanco Arce asume su cargo con la promesa de cambio y defendiendo que «la justicia no solo se imparte, también se transmite con ejemplo, cercanía y responsabilidad».
Por su parte, Ignacio Picatoste, recientemente elegido presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), ha proclamado que la presidencia «está en las mejores manos, por su experiencia, trayectoria y forma de defender» el cargo, afirmando que Blanco Arce es «ejemplo de que el liderazgo tranquilo y el respeto mutuo son herramientas poderosas para transformar la justicia y la sociedad».