El catedrático de Ingeniería de la Construcción de la Escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos Fernando Martínez Abella, candidato a rector de la Universidade da Coruña (UDC) en las elecciones del 4 de diciembre, apuesta por aproximar esta institución a Iberoamérica y por «captar talento» como parte de su programa.

«Creo que uno de los grandes proyectos de la UDC debe ser la aproximación a Iberoamérica, cuyo inmenso sistema universitario está ansioso de colaborar con las universidades españolas», señala en declaraciones a Europa Press el que fue vicerrector con el exrector José Luis Meilán Gil.

«La UDC se encuentra en una etapa marcada por los grandes retos que deben afrontarse», asegura Martínez Abella, entre los que cita el aumento de la «visibilidad de la institución» y «un mayor esfuerzo para divulgar la inmensa actividad» de la misma. «Es fundamental intensificar las medidas que permitan captar talento y atraer estudiantes», añade.

Por otra parte, remarca que, como universidad «financiada por la sociedad», tiene la obligación de ser un «modelo a seguir». «Modelo de democracia, de igualdad, de salud, de participación, de sostenibilidad, de innovación, de cultura y de debate de ideas», explica. Y, para lograrlo, apela a la necesidad de disponer de «recursos suficientes, que en la actualidad no lo son», admite.

Para abordar estos retos, «y atraído por la gestión universitaria», asegura que decidió presentar su candidatura. En cuanto a los motivos por los que ha optado por concurrir en solitario, ha dicho que no se presenta con un equipo porque cree «en la desprofesionalización de los vicerrectorados y no en la politización de los vicerrectores y las vicerrectoras y su perpetuación». «Incompatible con el desarrollo de su carrera académica», apostilla.

Al hilo de ello, plantea la posibilidad de «renovar algunos vicerrectores a lo largo de la legislatura, de modo que ocupen los diferentes vicerrectorados buenos gestores de una parte importante de los centros, sea cuál sea su grupo universitario». «Quiero un equipo que no deje sin representación a las personas más capaces de la comunidad universitaria, incluidas aquellas que no me otorguen su confianza», aclara.

Y es que, para Abella, proponer un equipo previo «impide configurar a posteriori uno plural». «Y no olvidemos que lo que se elige en estas elecciones es al rector, no a su equipo, su nombramiento es potestad de aquel», recuerda.

«EXCESO DE BUROCRATIZACIÓN»

Sobre el actual mandato del equipo de Nova Luce, con el catedrático de Microbiología Julio Abalde al frente del rectorado, considera que ha existido «un exceso de burocratizació» en la UDC lo que, a su juicio, «debe solucionarse en la próxima legislatura, mejorándose la gestión de procesos y replanteando el cuerpo de reglamento e instrucciones».

Mientras, sostiene que «uno de los grandes retos» de la nueva legislatura debe ser «la atracción de estudiantes, esenciales para la universidad y directamente relacionados con la financiación». «En mi programa apuesto por divulgar nuestra institución en Iberoamérica, donde el idioma y la raíz cultural comunes son el mejor cimiento para captar estudiantes de grado, postgrado y doctorado», precisa sobre algunas de sus propuestas.

NUEVAS TITULACIONES

Respecto a la posibilidad de nuevas titulaciones, apela a «seguir afianzando las titulaciones maduras y solventes, que constituyen la base sólida de nuestra oferta formativa». «Ello permite poner en marcha, además, nuevos títulos atractivos», recalca.

Con todo, sobre títulos concretos, cree que «son los diferentes centros de la universidad los que mejor conocen sus fortalezas docentes, y el rectorado debe apoyar y coordinar esas propuestas».

Sobre la vieja aspiración del título de Medicina, considera que «debe seguir siendo una aspiración de la UDC». A su juicio, varios motivos «lo justifican». «La intensísima demanda que tiene la única facultad que existe en el Sistema Universitario Gallego (SUG), en la que no hay aumento de plazas -indica sobre la de Santiago– la capacidad de la UDC y su excelente entorno hospitalario para afrontar con éxito ese título».

«Y la amenaza que supone la implantación de la titulación en alguna universidad privada, que en ningún caso debe suplantar la oferta pública en un ámbito trascendente para la sociedad», advierte.

FINANCIACIÓN

En otro orden de cosas, preguntado por el sistema de financiación de las universidades gallegas y si cree que hace falta más aportación económica para la UDC o es necesario reorganizar los recursos, indica que «ambas acciones son necesarias».

«La primera no depende de la UDC sino que es una reclamación que surge de la sociedad, pero en la segunda es obligatorio para nuestra institución negociar con la Xunta haciendo valer nuestras fortalezas, algunas relevantes en el SUG, por ejemplo nuestro índice de empleabilidad».

«Pero también deben redoblarse los esfuerzos para captar más fondos en proyectos de investigación o infraestructuras competitivos y en los contratos de transferencia tecnológica con empresas». «Estos han de conseguir sostener las instalaciones de investigación de la UDC, de enorme potencia en cualquiera de sus campus», añade.

CIUDAD DE LAS TIC

Respecto a uno de los proyectos del actual equipo de gobierno, la Ciudad de las TIC, indica que es «un gran proyecto» y destaca «el esfuerzo realizado en su impulso». No obstante, lamenta que «tras un año» no haya «un convenio firmado». «Y no sabemos en qué se concretará exactamente, aunque apoyaré la iniciativa con lealtad a la UDC», avanza.

En relación a este proyecto, apunta que «quizá la especialización de la Ciudad sea más beneficiosa que un planteamiento más generalista, ya que la UDC exhibe fortalezas muy destacables en varios campos ligados a las TIC, algunos incluso vinculados a la Medicina», sostiene.