Galicia tiene 1.943 personas en lista de espera de valoración de dependencia, lo que supone el 0,4% de la población potencialmente dependiente. Este porcentaje es el tercero más bajo de las autonomías, empatado con Navarra y Ceuta, y solo por detrás de Castilla y León (0,1%) y Aragón (0,35%).
Son datos a 30 de junio que recoge la segunda entrega del Panel del Sistema de Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD), publicado este martes por el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030. Precisamente, el lunes daba a conocer su propio informe la Asociación de Directores y Gerentes en Servicios Sociales, con cifras muy similares.
De acuerdo con ambos documentos, el tiempo medio en que una persona obtiene la resolución de la prestación por dependencia en Galicia es de 361 días, el cuarto más alto de toda España. Con todo, supuso una reducción de 19 días con respecto a hace un año y se aproxima a la media española, situada en 342 días.
A nivel estatal, hay un total de 180.794 personas en situación de dependencia se encuentran en lista de espera de la dependencia en España, lo que supone un descenso del 2,4 por ciento (4.356 personas menos) con respecto al año anterior.
«La bajada de la lista de espera se ralentiza, se alargan los tiempos de tramitación», ha explicado la secretaria de Estado de Derechos Sociales, Rosa Martínez, este martes, en una rueda de prensa en el IMSERSO para presentar estos datos.
Según los datos de la primera entrega del Panel del SAAD, ofrecidos el pasado mes de abril de 2025, un total de 182.532 personas estaban en la lista de espera de dependencia en España, lo que suponía un 9,4% menos con respecto al mismo mes del año anterior.
Martínez ha explicado que esta ralentización coincide con un aumento de la presión sobre el crecimiento del número de personas en el sistema (ya sean con prestación concedida, en tramitación y con una resolución a la que no se le asigna grado de dependencia). Cada mes reciben entre 10.000 y 15.000 solicitudes nuevas en el sistema, según ha puntualizado.
En concreto, el SAAD tramita los expedientes de 2,2 millones de personas y ha experimentado un crecimiento de 133.154 personas en el último año (un 6% más).
Con grado reconocido de dependencia, en junio de 2025, había 1,56 millones de personas, un 7,5% más que en junio 2024.
El nuevo informe, que corresponde al segundo trimestre de 2025, se ha centrado en analizar cómo el modelo de cuidados está evolucionando hacia servicios más personalizados que se ofrecen en ámbitos cercanos.
En concreto, de las 2.204.784 prestaciones totales del SAAD, el 56% (1.240.337) se despliegan en los hogares y en el entorno comunitario; y desde 2020, las prestaciones de proximidad han aumentado en 491.339 y su peso sobre el total se ha incrementado un 4%.
Según el informe, las prestaciones que más se combinan actualmente entre sí son la teleasistencia, la ayuda a domicilio y la prestación económica por cuidados familiares. La teleasistencia y la ayuda a domicilio son, además, los servicios tecnológicos y profesionales más habituales en el Sistema de la Dependencia con un 25,3% y un 19,4%, respectivamente.
Desde finales de 2020, el número total de estas prestaciones ha crecido un 119% en el caso de la teleasistencia y un 42,5% en la ayuda a domicilio, según el informe.
EL GRAN RETO: MÁS HORAS DE ATENCIÓN DOMICILIARIA
En cuanto a la intensidad del servicio de ayuda a domicilio, el estudio refleja que en 2020 la intensidad media era de 36,8 horas mientras que en junio se ha situado en 40,4 horas.
«Es uno de los grandes retos del sistema en un contexto de incremento de solicitudes. Se ha reducido en 61 días en los últimos 5 años, de 403 a 342, en junio 2025, un 15% menos pero todavía es una cifra muy alta», ha lamentado Martínez, que ha dicho comprender «las limitaciones de las pocas horas» para determinadas circunstancias.
La dificultad, según ha explicado, radica en los problemas para encontrar profesionales para atender la demanda existente. «Tenemos problemas serios de seguir aumentando las horas y quién va a proveerlas», ha apuntado la secretaria de Estado.
Otro de los recursos que Derechos Sociales ha señalado como claves para reducir el peso de los entornos institucionales tradicionales son los centros de día, una alternativa que supone ya un 6,4% de las prestaciones y que han crecido un 24% entre 2020 y 2025.
En todo caso, Martínez ha precisado que la atención residencial sigue desempeñando un papel relevante en el conjunto del sistema pues supone un 13% de las prestaciones, con un incremento del 25% en el número total de prestaciones entre 2020 y 2025. Si bien, quieren avanzar hacia residencias más parecidas a hogares.