Un total de 1.336 gallegos se acogieron hasta el momento al nuevo programa de prescripción de medicamentos no demorables, puesto en marcha el pasado mes de febrero por la Consellería de Sanidade en virtud de un convenio con los colegios de farmacéuticos de Galicia.
La cifra la ha dado la directora xeral de Planificación e Reforma Sanitaria, Sofía López Linares, en la comisión 5ª, de sanidad, política social y empleo del Parlamento gallego, al responder a una pregunta de la diputada del PP Dolores Hermelo sobre este programa que lleva apenas cuatro meses en funcionamiento.
En este período, se concertó una media de 17,36 citas diarias para renovar estas recetas. Las localidades con mayor adherencia son las ciudades de a Coruña y Vigo.
Además, los principales medicamentos que se retiran con esta modalidad están vinculadas a tratamientos con insulina, fármacos para la hipertensión, antiacoagulantes y terapias inmunosupresoras. Desde el pasado 16 de junio, el programa amplió su aplicación a nuevos grupos de medicamentos, entre ellos anticoagulantes antagonistas de la vitamina K, fármacos vinculadas al asma y la EPOC, la adrenalina ante choques anafilácticos y tratamientos para el dolor oncológico, entre otros.
En este contexto, la directora xeral ha garantizado que Sanidade realiza «un proceso de auditoría y análisis exhaustivo» de este convenio no solo para incorporar continuamente nuevos fármacos, sino también para detectar «incidencias» y mejorarlo.
López Linares ha respondido a una pregunta formulada en comisión por la diputada Dolores Hermelo, quien ha destacado que esta iniciativa busca evitar situaciones que causen un «riesgo alto» para la salud de los pacientes, especialmente los que están polimedicados. «Es una medida que da respuesta a un problema real» y que es «pionero» en Galicia, ha destacado la popular.